Desde que tenía cuatro meses, Hannah, la pequeña hija de este genio del photoshop llamado Stephen, fue diagnosticada con una extraña condición llamada linfohistiocitosis hemofagocítica (HLH), un trastorno de inmunodeficiencia que provoca que el cuerpo no pueda combatir las infecciones como debería hacerlo.
Debido a esto requirió un trasplante de médula ósea y sesiones de quimioterapia que la hicieron perder grandes momentos de diversión junto a su padre. Para compensar la situación, Stephen decidió que sería divertido editar las fotos de Hannah en situaciones riesgosas, y así enviar un mensaje sobre la donación de órganos.
Stephen y su hija Hannah han perdido muchos momentos juntos
Debido a que Hannah no tuvo “cosas normales” al inicio de su vida, Stephen se ha dedicado a tomar cientos de fotografías de su hija. Recientemente decidió darle un toque divertido a cada imagen, así que ahora la photoshopea en situaciones de riesgo.
La mayoría de las reacciones son positivas, pero las personas extrañas no saben que se trata de una broma y de inmediato me dicen que soy un mal padre.
Stephen compartió las imágenes en Reddit y el mundo se volvió loco
Hasta ahora ha alcanzado más de 100 mil votos y miles de comentarios de usuarios que se mostraron sorprendidos por lo que hacía la pequeña, incluso, algunos piensan que le está dando a su hija una mala crianza.
Aun así, Stephen quiere usar las imágenes para crear conciencia
Y, sobre todo, para hablar sobre la importancia de donar órganos, en especial la médula ósea. Stephen espera que cualquier usuario que vea las fotos considere ser un donador de células madre para que más niños como Hannah puedan salvarse.
De los 27 millones de donantes que existen en todo el mundo, solo tres fueron considerados aptos para el trasplante. La primera en donar fue una mujer alemana que eligió permanecer en el anonimato. Quiero que las personas vean las imágenes y después piensen en la donación de órganos.
Hannah recibió el mejor regalo
La pequeña solo tenía la posibilidad de uno en 9 millones de encontrar un donante. Afortunadamente una persona, que desea estar en el anonimato, donó su médula para que Hannah pudiera seguir viviendo. El mensaje de Stephen es claro: cuanta más gente se registre como donadora, más probabilidades hay de que las personas que lo necesitan encuentren uno.
Descubrir que había un donante compatible fue increíble; sin él, Hannah no estaría ahora con nosotros.