Actualmente, el esposo de Bridget, Bobby, se encuentra de servicio militar, y por lo tanto ella y sus dos hijos pequeños viven solos en su casa de Coraopolis, Pennsylvania.
Una noche, Bridget llegó a casa y descubrió que su termostato estaba roto y por lo tanto la casa se encontraba demasiado helada; sobre todo para su hijo más pequeño. Y aunque su esposo intentó ayudarla por mensajes de texto, esto no dio resultado, ya que el problema era algo que solo en persona podía solucionarse.
No obstante, un buen hombre apareció y demostró el agradecimiento que sentía por los militares en servicio ayudando desinteresadamente a Bridget y a su familia…
Sucede que Bridget se comunicó con Paul Betlyn, dueño de la compañía de calefacción y enfriadores Heating and Cooling, la marca de la que era el termostato de Bridget.
Paul respondió e intentó darle instrucciones a Bridget para reparar el termostato, y debido a que tampoco pudo resolver el problema vía telefónica, decidió ir hasta su casa y arreglar él mismo el problema; a pesar de que ya eran altas horas de la noche.
Bridget se mostró tan conmovida antes este acto, que le escribió una carta de agradecimiento a Paul Betlyn:
“Solo quiero tomarme un minuto para dar un reconocimiento a Paul Betlyn de Heating and Cooling. Llegué con mis niños y la casa estaba helada, y al momento de encender la calefacción me di cuenta de que no funcionaba. Lo llamé y pensé que seguramente tendría que dejar un mensaje en su contestadora, debido a la hora tan tarde; pero al final el mismo dueño del negocio me contestó y fue tan paciente conmigo por teléfono mientras me decía cuáles podían ser los problemas del termostato y cómo arreglarlo”.
“Cuándo nada de eso funcionó, me dijo que él necesitaba venir a mi casa para arreglarlo, y así fue. Mientras él trabajaba en la calefacción, platicamos de Bobby (mi esposo) y de su tiempo en servicio militar que estaba realizando fuera de casa. Mencioné que intenté arreglar el termostato con mi esposo por mensajes, pero no funcionó.”
“Llamada nocturna por problemas de calefacción. Descuento para militares en servicio. Total: 1 dolar”.
A pesar de la hora y de que el costo del arreglo hubiera sido de alrededor de 50 dolares, Bentlyn cobró únicamente un dolar de manera simbólica por el trabajo que el esposo de ella realiza como militar en servicio de los Estados Unidos.
Paul comentó después para una entrevista que el problema de calefacción de Bridget realmente era algo muy sencillo que se podía hacer en minutos. Además sintió un alivio al poder ayudar a una madre sola y con dos hijos, sin saber cómo arreglar una situación así en su hogar. También aseguró que él es muy apasionado de su trabajo, por lo que a la hora en la que un cliente marque con un problema, él hará todo para estar ahí.
“Después de haber terminado, yo estaba aún un poco preocupada por cuánto sería la cuenta de sus servicios, pero el escribió a mano una nota, la cual aparece en mi foto. Cuando intenté darle su dinero, el no lo aceptó; sólo dijo que el precio de un dolar era una broma, y que él se sentía agradecido con mi esposo por su trabajo como militar. Así que muchas gracias a Paul Betlyn, mi hogar vuelve a ser un lugar acogedor gracias a ti.”
Esto escribió Bridget en su cuenta de Facebook, junto con la foto de la nota de Betlyn, foto que se volvió viral en instantes, debido a los comentarios de apoyo para Bridget y su esposo Bobby.