La vida es un constante cambio de absolutamente todo, desde cosas minúsculas hasta las más importantes, y aunque normalmente no solemos prestarle mucha atención a dichos cambios, estos terminan por sorprendernos, aunque no en todas las ocasiones son gratas sorpresas.
Pero independientemente de que aquellos cambios que llegan a nuestra vida sean buenos o malos, solo queda en nosotras el saber cómo los asimilamos y los hacemos parte de nuestra vida, pues tenemos el poder de elegir qué actitud tomar ante dichas situaciones.
Todo comenzó con algo pequeño
Te contaremos sobre Daniella Álvarez, Miss Colombia 2012, quien hace poco menos de una semana comenzó a ser tendencia en redes sociales, pues compartió con sus seguidores una difícil situación personal por la que estaba pasando.
Aproximadamente desde fines del mes de mayo Daniella ingresó al hospital para una cirugía en la que se le retiraría una masa que se localizaba sobre su abdomen; la masa era de apenas un par de centímetros, por lo que los médicos y enfermeras sabían que sería una operación sencilla, o al menos eso creían en ese momento.
Las cosas no fueron tan sencillas como debieron ser
Durante la cirugía los médicos que la atendieron se percataron que la masa a retirar se encontraba completamente pegada a la aorta, que es la artería principal que lleva la sangre del corazón al resto del cuerpo.
Confiando en que se podía continuar con la cirugía, retiraron la masa pero jamás se esperaron a que la aorta se cerrara por completo, impidiendo la circulación de la sangre a la parte inferior de su cuerpo, más específicamente a su pierna izquierda.
Nuestro cuerpo y la vida son muy sabios
Los cirujanos le dijeron que la mejor opción era una segunda operación en la que se rehabilitaría su aorta con ayuda de un injerto; Dany aceptó la operación esperanzada en poder regresar pronto a casa a recuperarse, pero nuevamente las cosas no salieron como se esperaba.
El organismo de la exMiss Colombia no aceptó el injerto, por lo que se sometió a una tercer cirugía, en la que se le cambió el tipo de injerto utilizado. Aparentemente todo estaba bien, pues su cuerpo no lo había rechazado, pero ahora el problema es que la sangre continuaba sin llegar a su pierna izquierda; los médicos la sometieron a una cuarta operación, en la que la intención era ayudar a su organismo a hacer llegar la sangre a su pierna, pero no se logró.
Recordemos que todo pasa por algo
La situación de Daniella era complicada porque, ¿cómo una cirugía ‘sencilla’ había desencadenado todo eso? Los médicos hablaron con ella y le explicaron la situación, en la que básicamente tenía dos opciones, comenzar una vida en la que su pierna tuviera muchos problemas, pues no recibiría la sangre suficiente, o someterse a una última operación en la que básicamente amputarían su pie y parte de su pierna, esto para que su calidad de vida mejorara.
Dany estuvo acompañada de su familia en todo momento, por lo que tras hablar con ellos y analizar cada una de las opciones, valientemente y con la mejor de las actitudes eligió despedirse de su pie para comenzar una nueva versión de sí misma.
Yo tomé la decisión entre tener un pie no funcional a tener una opción de una prótesis que me deje volver a bailar champeta, que me deje volver a bailar bachata, que me deje poder correr, montar bicicleta y todas las cosas que me gustan. Decidí tener esta cirugía.
—Daniella Álvarez, Miss Colombia 2012
El día llegó y Dany abrazó la adversidad con valentía
Un día antes de la cirugía, Daniella grabó un video que subió a Instagram, donde explicaba qué era lo que había sucedido y por qué tomaba esa decisión. Y una de las cosas más admirables era la forma en que abrazaba su nueva realidad, pues a pesar de que sabía que ella había acudido al hospital por algo que se aseguraba era simple, jamás pensó que en menos de un mes su vida fuera a cambiar por completo.
Y Dany nos da a todas una gran lección, y es que a pesar de cualquier adversidad que tengamos en nuestra existencia el regalo más grande de todos es la vida y la salud, ya que sin ellas no podríamos disfrutar de nada, ni todos sus grandes y pequeños placeres.
Quiero compartir con ustedes mi nueva versión, amo mi cuerpo igual que antes, estoy feliz de estar aquí en este mundo para superar todos los retos que vienen en mi nueva vida. Sé que de la mano de Dios TODO lo lograré. ‘Pies, para qué los quiero si tengo alas para volar’. ¡Vamos para adelante!
—Daniella Álvarez, Miss Colombia 2012