El amor es una de las fuerzas más poderosas en el mundo y aunque hoy en día se piense todo lo contrario, este sentimiento es capaz de modificar el rumbo de la vida de una persona.
Esto fue exactamente lo que le sucedió a Pak Arifin, un hombre que durante décadas esperó por su amada, pero esta nunca llegó. Sin embargo, Arifin nunca perdió la esperanza ni la dejó de amar.
Un amor que simplemente no pudo ser
Arifin es originario de Malang, Indonesia. En la década de los 70, el país atravesaba por una situación muy difícil, que los llevó a él y a su amada a separarse. Sin embargo, eso no impidió que ambos se prometieran volver a reunirse. Aunque esta promesa jamás se cumplió, él no perdió la esperanza y después de que la ciudad estuvo segura de nuevo, acudió cada día a la misma esquina en dónde él y su pareja se veían. Solía estar ahí desde antes de que el sol saliera hasta la noche.
Pak la esperó hasta su último día de vida
La mayoría de los ciudadanos de Malang conocían a Pak y su historia. Aunque les parecía bastante tierno, sabían que las condiciones de vida que él tenía no eran las más adecuadas, pero nunca pudieron convencerlo de dejar de acudir a dicho lugar. Desgraciadamente, en abril del 2017 se encontró a este hombre tirado en la banqueta con signos de violencia.
Quienes lo solían ayudar lo llevaron al hospital, pero lamentablemente Arifin falleció poco después de haber ingresado a la clínica. Jamás pudo reencontrarse con su amada, por lo que sus amigos decidieron colocar un epitafio en el lugar donde siempre se le veía:
Descanse en paz
Mbah Arifin / Sr. Gombloh
XXXX – 8 de abril de 2017
Desde 1970, él se sentaba en este lugar día y noche para cumplir su promesa.
Esperaba a su amada hasta que finalmente llegó su hora de partir.
‘El poder del amor’