Un bebé prematuro es aquel que nace antes de la fecha estimada. Mientras más pequeño es, más cuidados necesita porque aún no se ha desarrollado por completo, y los médicos hacen todo lo posible para replicar sus necesidades fuera del útero, con la finalidad de evitar cualquier sobreestimulación que pueda afectar su correcto desarrollo.
A pesar de su esfuerzo, sigue siendo una tarea bastante difícil, ya que hay infinidad de detalles imposibles de imitar, como el hecho de permanecer dentro de un medio acuoso que esté conectado a su mamá todo el tiempo, su alimentación e incluso el cordón umbilical, con el cual interactúa dentro de su madre.
¿Cómo ayudarlos?
Como ya dijimos, ambientar todas las necesidades de un bebé no es tarea fácil. Aunque haciendo énfasis en la réplica del cordón umbilical, los hospitales neonatales han tenido una gran idea y están pidiendo a las personas que hagan pulpos de crochet para los bebés prematuros.
Pero… ¿por qué darles juguetes?
Para aclarar está situación, los pulpos de crochet no son utilizados como juguetes o peluches.
La razón por la cual se están tejiendo es debido a que durante el embarazo, son muchas las ocasiones en que el bebé se encuentra con el cordón umbilical, lo toca e incluso lo sujeta con sus manitas; por eso ponerle un pulpo a crochet con sus ocho tentáculos, es una manera de darle un nuevo cordón al cual aferrarse por algunos momentos y sentirse seguro.
¡Una gran idea!
Esta nueva idea ha tenido resultados tan efectivos que en el 2013 apareció Spruttegruppen, una fundación dedicada a recolectar pulpos de crochet hechos por voluntarios de todas partes del mundo y se encarga de llevarlos a distintos hospitales en Dinamarca.
Hasta el momento han recolectado más de 21 mil pulpos. En su página puedes encontrar los manuales sobre cómo hacerlos, y si te gusta la idea, puedes ayudar a estos pequeñitos.