Estos Juegos Olímpicos son cada vez más inclusivos, más reales y mucho mejores a medida que avanzan, porque las buenas noticias no dejan de llegar, como la de Laurel Hubbard. La levantadora de pesas hizo historia al convertirse en la primera mujer abiertamente transgénero en competir en unas Olimpiadas.
La joven de 43 años también es una de las competidoras de mayor edad en los juegos de Tokio y aunque anteriormente había participado en competencias masculinas de levantamiento de pesas antes de hacer oficialmente su transición en 2013, esta es una de las más importantes porque después de 18 años de que el Comité Olímpico Internacional creara una política para permitir competidores transgénero, finalmente una llegó a las justas.
La competencia de Laurel fue histórica
La neozelandesa compitió el lunes 02 de agosto en la categoría de peso superpesado femenino de 87+ kg. Por desgracia no consiguió una medalla, pues sus tres intentos de levantamiento fueron fallidos. Sin embargo, su participación se sintió como una tremenda victoria, especialmente para las personas transgénero.
Hubbard fue elegida para competir en 2015, cuando el Comité Olímpico Internacional publicó cambios en sus pautas de elegibilidad de atletas transgénero, los cuales incluyen una limitante en los niveles de testosterona. En el caso de la transición de hombre a mujer, el comité menciona que los niveles deberán estar por debajo de los 10 nanomoles por litro durante al menos 12 meses antes de su primera competencia.
Kereyn Smith, jefa del Comité Olímpico de Nueva Zelanda, calificó la participación de la atleta como “histórica”.
Ella es nuestra primera atleta olímpica que ha pasado de ser hombre a ser mujer. Sabemos que hay muchas preguntas sobre la equidad de los atletas transgénero que compiten en los Juegos Olímpicos, pero me gustaría aprovechar esta oportunidad para recordarnos a todos que Laurel ha cumplido con todos los criterios requeridos.
Su participación ha desencadenado una serie de críticas
Algunas personas pusieron en duda la actuación de Laurel, pues argumentaron que la competencia no sería igualitaria y señalaron que ella vivió gran parte de su vida como hombre y eso sería una ventaja innegable sobre las demás mujeres.
Sin embargo, Lauren demostró que está al nivel, pues desgraciadamente fue eliminada de la competencia al conseguir solo levantar 120 kg en su primer intento y fallar en dos ocasiones con los 125 kg. Al final de cuentas, ella solo quería competir como una persona más en su categoría.