Es común que en las ceremonias de graduación se les exija a los alumnos un código de vestimenta para subir al estrado y recibir su papelería de la manera más formal posible. Pero ¿qué sucede cuando el alumno no tiene este tipo de ropa o no se siente cómodo al usar estas prendas?
Lo más probable es que acuda a su entrega de cartas con lo que mejor le acople, algo que no debería representar problema alguno, pero que así lo fue para un joven que concluyó sus estudios en la secundaria en Baltimore, Estados Unidos. Afortunadamente, su profesor salió al rescate, provocando una ola de aplausos en internet. A continuación te explicamos por qué.
En plena graduación y a solo unos minutos de subir al escenario, las autoridades escolares le notificaron a un joven que no podía subir a recoger su papelería porque no tenía los zapatos adecuados para el evento.
El infortunado momento puso en jaque al chico, quien no tenía zapatos adecuados ni en casa ni junto a él, pues solo usaba zapatillas deportivas. Creyendo que todo su esfuerzo se había arruinado, acudió con su profesor John Butler, quien no tardó en brindarle ayuda.
El profesor Butler no dudó en despojarse de sus propios zapatos con la intensión de prestárselos a su alumno. El chico aceptó la ayuda, pero los zapatos le quedaban algo grandes, por lo que tuvo que caminar arrastrando los pies para que nadie notará lo que ocurría, ni siquiera las personas que se negaron a que subiera al escenario con sus zapatillas deportivas.
La historia fue compartida a través de Facebook por el profesor, ganándose el respeto, admiración y cariño de miles de internautas.
Él se acercó diciéndome ‘Sr. John, no me dejan graduarme porque no tengo los zapatos adecuados para el código de vestimenta. Dice la señora de ahí abajo que no puedo subir para obtener mi diploma por los zapatos que llevo puestos’.
Así que le di mis zapatos. Y aquí está la parte divertida: mis zapatos eran dos tallas más grandes que los suyos. Justo cuando lo llamaron tuvo que deslizar sus pies por el escenario para recibir su diploma. Nos reímos mucho.