La modelo sensación de las redes Essena O’Neil ha hecho miles de dólares modelando en Instagram y compartiendo sus fotografías con más de 800 mil seguidores, pero todo cambió la semana pasada. La modelo australiana de 18 años borró dos mil fotos de su cuenta y cambió el nombre a “Social Media is Not Real Life” (las redes no son la vida real).
Desde entonces ha subtitulado nuevamente muchas de las fotografías restantes para revelar la verdad detrás de ellas, y lanzó un nuevo sitio, “Let’s Be Game Changers” (Seamos cambiadores de juego), para ayudar a otros jóvenes a desengancharse de un mundo virtual regido por los likes y follows.
Somos la generación del lavado de cerebro:
Sin darme cuenta, pasé la mayor parte de mi adolescencia como una adicta a las redes sociales, a la aprobación social, al estatus y a mi apariencia física –escribió O’Neill en un post de Instagram el 27 de octubre–. Las redes, especialmente como las usaba, no son reales. Es un sistema basado en la aprobación social a través de un “me gusta”, validación en el número de vistas, éxito en el número de followers. Es una forma de juicio perfectamente orquestado.”
Ella eliminó y re-nombró sus fotografías en Instagram para revelar la verdad detrás de sus imágenes
“Aquí tenía acné y usaba muchísimo maquillaje. Sonreía porque pensé que me veía bien. La felicidad basada en lo estético sofocará tu potencial aquí en la tierra”
“Por favor dale like a esta foto. Me puse maquillaje, ricé mi cabello, usé un vestido ajustado, joyería grande e incómoda… Me tomó más de 50 disparos hasta que tuve uno que pensé que podría gustar, luego edité esta selfie en varias aplicaciones para poder sentir un poco de aprobación de su parte”.
“Tenía 16 años aquí. ¡16! No usé este atuendo fuera de casa, sólo para la fotografía. ¿Cuál es la obsesión con tratar de parecer mayor y más sexy?”
Pasó más de 50 horas por semana ‘curando’ su imagen en las redes: “Era miserable. Me sentía estancada. Sin inspiración. Enojada”
“Nada es más inspirador que fingir una sonrisa posando para la cámara, crear un collage de ti misma y agregar, además, pequeños efectos”
“Literalmente, tomé fotos contra una pared blanca por ninguna otra razón más que para subir una buena foto a Instagram. Cuando veas imágenes en línea, observa la intención detrás de la foto. Las redes sociales y la adicción a la apariencia se ha llevado nuestra juventud. Nunca volvería a usar esos tacones o ese vestido fuera de casa. Tenía 15 años”
“No disfrutaba el acto de crear: escribir o cualquier otra forma de expresión artística como lo hice alguna vez cuando era niña”
“Si te descubres viendo a las ‘chicas Instagram’ y deseando que tu vida fuera como la suya… Date cuenta que sólo ves lo que ellas quieren. Si etiquetan a una compañía, el 99% de las veces es pagado”
“Esto es lo que me gusta llamar una fotografía espontánea perfectamente falsa. Nada aquí es espontáneo.”
Essena también subió a su cuenta de YouTube, con más de 270 mil subscriptores, un video en el que explica el origen de esos cambios:
https://youtu.be/G35L7_Cb_8I?t=1s