Hoy en día, hay muchas compañías que nos ofrecen las herramientas para descubrir la historia de nuestra familia. A través de una prueba de ADN, podemos encontrar a parientes lejanos y saber más de nuestro árbol genealógico. Para muchas personas, estas nuevas propuestas han significado encontrar a hermanos y padres que, hasta el momento, eran desconocidos.
Para una mujer estadounidense, estas compañías representaron la oportunidad única de conocer a un hijo que ni siquiera sabía que tenía.
En busca de su familia
Kristin Schoonveld decidió buscar a su familia biológica después de adoptar a su primer hijo, Nick, en 2018, tras pasar años cuidando de él. Kristin siempre supo que era adoptada, pero al ir construyendo una familia propia, le entró la curiosidad de conocer a sus parientes de sangre. Se hizo una prueba de ADN y subió los resultados al sitio web My Heritage, donde las sorpresas comenzaron.
Primero, encontró a su madre y se puso en contacto con una de las hermanas de su mamá, ya que estaba muy nerviosa para hacer contacto directo con ella. Su tía se sorprendió bastante, pues nadie sabía siquiera de la existencia de Kristin. Sin embargo, el verdadero shock llegó cuando se dispuso a buscar a su papá – tiempo después, su madre biológica le confesó que su padre había fallecido años atrás – y le llegó una notificación que no esperaba. Kristin, quien nunca había estado embarazada, encontró a su hijo biológico.
Él la estaba buscando
Parker Erickson, de 26 años, fue concebido mediante técnicas de fertilidad con la ayuda de óvulos donados. Cuando sus padres le dijeron, él se preguntó cómo sería su familia biológica, si tendría hermanos o primos y, eventualmente, su novia lo alentó a que se hiciera una prueba de ADN.
Antes de encontrar a Kristin, su madre biológica, Parker encontró a una mujer llamada Tami Kennerson, quien fue adoptada cuando era bebé y también estaba en busca de su familia. La base de datos marcaba que Parker y Tami eran primos, pero no había más indicios de quién más podría ser parte de su familia biológica, hasta que Kristin subió su información y el parentesco entre Parker y Tami cambió: Tami era su tía, no su prima, y era media hermana de Kristin.
Los lazos familiares son muy fuertes
Años atrás, Kristin donó sus óvulos a una clínica porque pensó que sería agradable ayudarle a alguien a tener una familia. Nunca se imaginó que se reuniría no solo con su hijo, sino con su hermana. Todos están muy felices de haber encontrado a sus familiares. Además, entablaron lazos muy fuertes a pesar del poco tiempo que llevan conociéndose.
Parker es muy dulce con Nick, quien siempre quiso un hermano. Conocer a Parker y a Tami es increíble. Expande mi felicidad. Hemos formado una relación que va a durarnos el resto de nuestras vidas.