El cáncer es uno de los diagnósticos más aterradores que cualquier persona pueda tener. Aún cuando la ciencia médica avanza a pasos agigantados y cada vez hay más casos de recuperaciones exitosas, la experiencia es tan fuerte que realmente nadie está preparado para enfrentar una situación así.
Heather McManamy, una mujer de Wisconsin, fue diagnosticada con cáncer de seno en el 2013. Al enterarse que estaba en fase 2, esta valiente madre decidió dejar testimonio del inmenso amor por su hija de cuatro años como verás en esta conmovedora e inspiradora historia.