Cuando pensamos en una boda, tendemos a imaginar que todo tiene que ser perfecto porque representa la culminación de la etapa de noviazgo y el inicio de una vida en común. Sin embargo, entre muchos factores que influyen para que un matrimonio sea exitoso, nunca ha figurado el tamaño del anillo de boda, aunque no todos lo vean de esa forma.
Casarse es un concepto que va más allá de una fiesta, su parafernalia y todos los símbolos que indican que se tiene un compromiso con otra persona. Las redes sociales, revistas y publicaciones para mujeres bombardean constantemente con imágenes de grandes anillos de compromisos con múltiples piedras, que entre más caras y grandes, mejor.
Rachel Pedersen leyó un comentario que una amiga hizo en su perfil de Facebook en el que le decía que debería “actualizar” su pequeño anillo de boda para que la gente viera lo exitosa que era; algo que la hizo pensar sobre todo lo anterior y compartió su reflexión en la red social.
“Sí, yo sé que mi anillo de bodas es pequeño.
Mis amigos y familia a menudo me preguntan cuándo lo voy a ‘actualizar’. Después de todo, no representa el nivel de éxito que hemos alcanzado. Incluso una persona me dijo que podría usar un anillo más grande para los eventos importantes, para que los demás no piensen que no he sido exitosa.
Esperen. ¿Desde cuándo las medidas o el tamaño de un anillo se convirtieron en una medida para el éxito? Para mí, el anillo es mucho más. Mi anillo simboliza un torbellino, un guion, una historia de amor memorable… Me recuerda cómo mi esposo y yo nos conocimos y nos enamoramos esa noche en una cena en Pekin”.
El trabajaba limpiando ventanas y yo era una madre soltera. Una semana más tarde nos profesamos nuestro mutuo amor, con él llevando la conversación. No podíamos dejar de soñar con nuestro futuro, emocionados por tener un bebé, comprar una casa, y dormir juntos cada noche. No podíamos esperar el futuro, y no lo hicimos.
Trece días después de conocernos, nos fugamos. Ni siquiera pensé en el anillo hasta que mi esposo me sorprendió antes de la ceremonia. Usó todos sus ahorros para regalarme una pequeña muestra de su amor. Y digo pequeño sólo porque palidece en comparación con lo grande de su amor, aún después de muchos años de matrimonio.
Eso, amigos, para mí es éxito.”