Las redes sociales se convirtieron en la plataforma para que una niña diera a conocer su batalla contra el cáncer, que afortunadamente venció. Todo comenzó cuando a Delfina, una pequeña de ocho años, le detectaron un linfoma de Burkitt -cáncer linfático que se extiende hacia la médula ósea, la sangre y el sistema nervioso central-, enfermedad que avanza rápido y en la mayoría de los casos es mortal.
Los médicos afirmaron que el panorama era adverso para Delfina, por lo que sus padres decidieron crear un grupo en Facebook, Todos por Delfi, para publicar el proceso de la menor desde el primer día de su tratamiento.
La batalla contra el cáncer no fue fácil, a sus tan solo ocho años Delfi enfrentó 52 sesiones de quimioterapia, estudios y cirugías, por lo que compartió su testimonio sobre el miedo que le daba pisar el hospital:
La primera vez que me internaron pensaba que me iban a tratar mal, yo no les contestaba nada, pero después me acostumbré a los doctores, a las inyecciones. Ya no lloro cuando me sacan sangre.
Los usuarios que conocieron la historia siguieron el proceso por medio de imágenes que su familia compartió en internet desde el día uno hasta el de la victoria contra la enfermedad. Un día la madre de Delfi publicó una fotografía de su hija sosteniendo un cartel en el que decía que logró vencer el cáncer:
No tuve oportunidad de hacer un cartel como ella quería, en medio de la felicidad y no saber cómo reaccionar, siento que estoy en una nube. A ustedes que rezaron cada día por mi hija les debo mi vida entera. Mi hija, mi hermosa, dulce y valiente Delfi… Ella se lleva todo el crédito, todo.
Aunque su familia está consciente de que el cáncer puede regresar en cualquier momento, están orgullosos de que su pequeña sea tan valiente y que con coraje le diera la cara a un padecimiento que parecía ser mortal.
Otra historia como esta ocurrió en Alemania. Su protagonista, Marlene Bierwirth, fue diagnosticada con meduloblastoma -tumor cancerígeno cerca de la base del cerebro. Esto hizo que la joven de 19 años tomara valor y no se dejara caer ante la enfermedad, por lo que decidió compartir en Instagram su tratamiento y la vida que lleva como cualquier joven de su edad pese al padecimiento.
La alemana tiene 156 mil seguidores y diferentes marcas ya la han comenzado a buscar.
