Cuando un niño vence el cáncer, el mundo entero sabe que ganó un gran guerrero. Estos pequeñines tan valientes son dignos de admiración. En 2014 la fotógrafa Lora Scantling fotografió a 3 niñas que luchaban contra el cáncer infantil.
La imagen capturó a 3 hermosas niñas, Rylie, de 3 años; Rheann, de 6, y Ainsley, de 4, en un abrazo que mostraba el apoyo que mantenían. Rápidamente la emoción de la imagen capturó a las personas de todo el mundo y se convirtió en un hecho viral. Tres años más tarde. Scantling volvió a capturar a estas tres hermosas guerreras para demostrarle al mundo lo valientes que fueron.
Ellas son las 3 valientes princesas
Durante una entrevista para el sitio web The Huffington Post, Scantling mencionó que tomar la primera imagen fue una experiencia poderosa, porque le recordaba una lucha personal.
“Mi padrastro perdió su lucha contra el cáncer de pulmón, y yo quería hacer algo que fueran más que palabras para expresar mis sentimientos. Elegí el cáncer infantil porque también tengo un amigo que perdió a su pequeño hijo a causa del cáncer antes del proyecto. Hice una publicación en Facebook buscando niñas que lucharan contra el cáncer, y de ahí nació esta linda fotografía”.
Aunque las niñas no se conocían antes de que se tomara la foto, se hicieron amigas rápidamente. Las tres lograron superar el cáncer y, para festejar su victoria, se reúnen cada año para tener una nueva fotografía juntas.
Esta es la imagen del grandioso reencuentro
“Este año se ve lo mucho que han crecido y lo saludables que se encuentran en comparación con los años anteriores”.
En la foto tienen una banda de color dorado en el cabello que representa el cáncer infantil. También se abrazaron de la misma forma en que lo hicieron años anteriores, solo para recrear al retrato original.
Así es como lucieron en el 2016
Scantling espera que ella y la familia de las niñas puedan inspirar a las personas para que conozcan más acerca del cáncer infantil. Solo un 4 por ciento de los fondos federales en Estados Unidos son destinados a la investigación del cáncer pediátrico.
“Es necesario que se tengan más fondos para los tratamientos contra el cáncer infantil”.
Para Scantling, trabajar con las niñas fue una gran experiencia
“Las niñas, como un grupo, son increíbles cuando están juntas. Ellas saben lo que significa esta fotografía para el mundo. Ellas saben que están haciendo la diferencia”.
Las niñas aún conservan marcas de guerra
A pesar de que todas están libres del cáncer, Rheann conserva huellas que la enfermedad dejó en su cuerpo. A ella no le puede crecer el cabello debido a las radiaciones a las que fue sometida y es probable que sus ojos no vuelvan a estar en su ubicación original debido a su tumor cerebral. Durante la última sesión de fotos, las niñas hablaron sobre las marcas que reflejan su batalla contra el cáncer
Rheann dijo que el cáncer es como un dragón, a lo que Scantling respondió: “sí y la quimioterapia es el príncipe”.
Ryle mencionó: “el cáncer se metió con las princesas equivocadas”.