En este mundo lleno de caos, aún existen personas que dan todo sin esperar nada a cambio. Cuando el bebé de Wendy Cruz- Chan nació sin vida, de inmediato pensó que tenía que hacer algo para rendirle un homenaje. Cuando sus pechos estaban llenos de leche supo lo que tenía que hacer.
Sus pensamientos viajaron a las madres que necesitaban leche materna adicional y fue entonces cuando decidió donar toda su leche.
Ella es Wendy Cruz-Chan
Wendy explica en su página de Facebook que extrajo leche durante tres meses para alimentar a seis bebés diferentes. Es un trabajo exhaustivo, al igual que lo es para todas las madres; a veces, por ejemplo, Wendy la recolectaba a media noche. Cuando por fin cumplió los tres meses, dejó de extraerla para que su cuerpo estuviera listo para un siguiente embarazo. Hasta ese momento había extraído y donado 2 mil onzas de leche materna.
Después decidió compartir su historia en Facebook, y no es de extrañar que se convirtiera en un suceso viral con más de 20 millones de “me gusta”. Su historia habla sobre la generosidad y la forma en la que una mujer puede sanar después de una pérdida.
Una historia que ayuda a reparar un corazón roto
Después de que Wendy perdió a su bebé, encontró en Internet el apoyo de muchas madres con historias similares. Este proceso fue para ella increíblemente poderoso y curativo. Al compartir su historia, espera demostrarles a otras madres que es posible encontrar un poco de paz, incluso en las circunstancias más desgarradoras.
“Soy el tipo de persona que trata de ver lo positivo de la situación; tuve que tomar mucho valor para llegar a donde estoy ahora”.
“Extraer mi leche me ha ayudado a dejar un poco de lado mi dolor para concentrarme en las madres que necesitan mi ayuda. Pensar que esos bebés crecerían sanos me ayudaba a seguir adelante”.
Este es el mensaje de Wendy:
Hoy hace 3 MESES, he iniciado en un proyecto de lactancia, 3 días después de dar a luz a mi bebé fallecido, Killian.
Me he extraído y donado 2,038 onzas de mi leche materna para alimentar a 6 BEBÉS.
Finalmente he alcanzado mi meta personal, más de 2,000 oz en 3 MESES. Ahora es tiempo de terminar mi proyecto de lactancia y concentrarme en mí misma mientras consigo que mi cuerpo se prepare para un próximo embarazo.
Estoy muy agradecida por ayudar a todos esos bebés con mi leche y conocer a sus familias. Extraer la leche cada 3-4 horas al día, incluidas las noches, fue muy agotador. Pero valió la pena. Ver a esos bebés creciendo con mi leche, realmente me ayudó en mi proceso de sanación. Quería demostrar que incluso después de un trágica muerte fetal, puedes convertir ese dolor en algo positivo e inspirar a los que te rodean. A través de mi dolor he evolucionado y aprendí a sacarme de la oscuridad.
Estoy tan bendecida de estar rodeada de tanta gente, amigos, familia y, lo más importante, mi maravilloso esposo John y mi hija Ariya, en quienes me apoyo para continuar.
Ahora mi próxima meta es conseguir un apoyo en el hospital metodista de NY y espero que otros hospitales de Nueva York se sumen en memoria de Killian. www.youcaring.com/killiancuddlecotnyc
Todo esto por el amor incondicional por mi Killian que está en el cielo. Todo esto para romper el silencio de los bebés que mueren al nacer.
Un avalancha de comentarios positivos
Wendy admite que se sorprendió al ver que su publicación se había convertido en un gran suceso, incluso, recibió una avalancha de mensajes y solicitudes de amistad en su cuenta de Facebook que la hicieron sentir abrumada, conmocionada y sorprendida. Pero lo mejor fueron los comentarios positivos que recibió de madres que esperan unirse a esta noble causa.
Wendy espera concebir un bebé en el futuro y crear una campaña para brindar ayuda a las familias que tienen que lidiar con una pérdida como la que ella padeció.