Amamantar es un gesto de amor en el que la madre alimenta a su pequeño y, a su vez, crea lazos de seguridad y afecto. Sin embargo, contrario a lo que se piensa, los hombres también pueden hacerlo con ayuda de leche en polvo y un pezón artificial.
No, lo que decimos no se trata de ninguna broma. Los hombres también pueden amamantar a sus hijos y esto es una actividad comúnmente realizada en hospitales de países europeos y en Estados Unidos. Para comprobarlo está la historia de Maxamillian Kendall Neubauer, quien se encargó de alimentar a su hija recién nacida, enviando un poderoso mensaje de paternidad y responsabilidad afectiva.
Maxamillian y April Neubauer, originarios de Wisconsin, Estados Unidos, dieron la bienvenida a su hija en 2018, pero es hasta fechas recientes que su historia se viralizó en redes sociales.
April tuvo complicaciones durante los últimos meses de gestación, llegando a sufrir convulsiones durante la etapa de parto, motivo por el cual fue intervenida y su bebé llegó al mundo a través de una cesárea. Después del parto, April quedó inconsciente por unos momentos y tuvo que ser llevada a reposo.
Entonces la enfermera y los doctores hablaron con Maxamillian y le dijeron que todo estaría, pues a pesar de las convulsiones, April se encontraba estable al igual que su bebé. Posteriormente pasó a los cuneros y conoció a su hija.
En los cuneros, una enfermera le dijo que debían alimentar a la bebé y le preguntó si estaba dispuesto a hacerlo. Él accedió de inmediato y con ayuda del personal médico logró amamantar a su hija de manera artificial.
Una enfermera salió con mi hermosa niña. Fui a la sala de recién nacidos, me senté y me quité la camisa para cargar a mi bebé y tenerla piel a piel, quería que supiera que estaba a su lado y la protegería en todo momento.
La enfermera dijo que tenía que darle una fórmula para empezar la alimentación. Entonces me preguntó si me gustaría ponerme un pezón falso y simular un amamantamiento. Como soy un gran bromista dije: ‘Seguro, por qué no’.
Nunca pensé que en verdad amamantaría. ¡Fui el primero en amamantar a mi hija! Mi suegra no podía creer lo que estaba viendo.
Las enfermeras quedaron conmovidas con el gesto de Maxamillian, y él, de una manera sinigual, entendió el significado del amor verdadero.
Sentí una conexión desde el momento en que vi a mi hija. Espero poder abrazarla y ayudarla a amamantar.
Su gesto se ha transformado en un hermoso y poderoso mensaje de paternidad, derribando estigmas y demostrando que en la crianza, mamá y papá tienen el mismo nivel de obligaciones.