Seguro es que para ti, igual que para la mayoría de las chicas, papá es el más grande superhéroe del mundo: te salvó de peligrosas caídas, luchó contra dragones, jugó contigo bajo la lluvia, te permitió salir a más de dos fiestas a las que tu mamá se negó e hizo infinidad de locuras a tu lado, convirtiéndose no solo en tu héroe sino en tu mayor cómplice.
Cada papá es único en el mundo y cada uno expresa su apoyo a su manera, sin importar lo que haya que hacer en el camino, como en el caso de Ben Sowards, quien tuvo que recoger en la escuela a su pequeña hija Valerie con los pantalones… un poco húmedos.
Todas tenemos momentos malos
Durante su día de escuela, Valerie sufrió un pequeño percance en sus pantalones (algunas hemos pasado por ese momento, y no, no es divertido), con lo que tuvo uno de los peores episodios que un estudiante puede vivir.
Entre llanto y súplicas llamó a su mamá, Connie Sowards, pidiéndole ayuda para que fuera por ella de inmediato y salir del colegio en ese mismo instante; lamentablemente, su mamá no podía asistir, por lo que su papá acudió en su rescate.
Pero siempre hay un héroe para salvarnos
Cuando Ben llegó al colegio sabía que las cosas no andaban bien, tenía que apoyar a su hija y para eso ideó el mejor de todos los planes: tomó una botella de agua entre sus manos y la derramó sobre sus pantalones, fingiendo que se había orinado, solo para que su hija se sintiera mejor.
Por si fuera poco, atravesó todo el patio del colegio y entró a la oficina del director con los pantalones mojados. Después utilizó la mochila de su hija para tratar de ocultar su enorme mancha, algo que no sucedió.
“Cuando supe lo que le ocurrió a mi hija, se me partió el corazón en dos. Pude sentir su miedo y su vergüenza en ese momento, y tenía que hacer algo para ayudarla”.
-Ben Sowards
Y jamás olvidaremos lo que hizo por nosotras
Valerie no entendía lo que había ocurrido con su papá ni cuál era la razón por la que él no había alcanzado a llegar al baño. Lo que sí sabía era que un accidente le ocurre a cualquiera y no hay por qué avergonzarse de ello; al final, nadie es perfecto.
“Cuando entré a la oficina, ella me miró llena de asombro”.
-Ben Sowards
Se merece el premio al papá del año
Al llegar a casa, la hermana más grande de Valerie, Lucinda, compartió en su cuenta de Twitter las fotografías sobre el magnífico y amoroso plan que tuvo su padre, y recibió más de 59 mil retuits, 242 mil likes y una lluvia de comentarios que colocaron al Sr. Sowards como el mejor papá del año.