El amor no conoce de clases sociales, edad o distancia. Para comprobarlo están Ayse y Darrin, una pareja que se conoció a través de la magia de las redes sociales y terminó por unirse en matrimonio en una videollamada.
Su relación es una historia de amor moderno en la que Facebook fue su cupido, pero a diferencia de otras parejas que mantienen romances a kilómetros, ellos nunca se han visto o convivido en persona. Sin embargo, ya se juraron amor eterno para estar juntos hasta que se bloquen o una falla en la red de internet los separe.
Ayse y Darrin se conocieron durante la pandemia a través de Parejas, una función de Facebook que presta un servicio similar a Tinder u otras apps de citas. Su conversación comenzó sin mucho interés, pero al paso del tiempo, formaron una linda amistad que los unió en un romance a distancia, ya que Darrin vive en Detroit, Estados Unidos, y Ayse es originaria de Reino Unido.
Al vivir en diferentes países, han tenido que lidiar con la diferencia de horario, que es de cinco horas. Si bien no parece ser demasiado tiempo, esto ha causado algunos problemas en su comunicación, ya que también deben cumplir con un horario de trabajo y estudios.
Su relación se fortaleció tanto que Ayse ahorró el dinero suficiente para viajar a Estados Unidos y conocer a Darrin, pero las restricciones por covid-19 hicieron que su vuelo fuera cancelado en dos ocasiones.
A pesar de que no podían viajar para conocerse, conversaban a través de WhatsApp, realizaban videollamadas e incluso se enviaban obsequios por paquetería. Su relación se volvió tan intensa que Darrin le pidió matrimonio a Ayse y aunque lo hizo por videollamada, se dio a la tarea de buscar un lindo anillo de compromiso y se arrodilló como todo un caballero para realizar la petición.
Ella aceptó la propuesta, pero luego dudó de que todo fuera cierto. Sin embargo, Darrin le explicó que en Utah, Estados Unidos, el matrimonio a través de una videollamada es completamente legal. Esto significa que su enlace sería totalmente valido para la ley, convirtiéndolos en esposos de manera oficial.
Su boda fue sencilla, sus familiares y amigos los acompañaron en videollamada y aunque no hubo un choque de copas, su amor es tan puro y sincero que ya nada ni nadie los puede separar.
Nunca imaginé que esto me pasaría en un millón de años. No creo que nadie esperaba esto cuando empezamos a hablar el año pasado. Pero estamos casados y todo es completamente legal y oficial, todavía no puedo creerlo. Ha sido muy difícil no poder reunirnos adecuadamente, pero a la larga nos hará más fuertes porque hemos tenido que pasar por todo esto para estar juntos.
– Darrin
Lo que empezó como una simple plática terminó por guiarlos hacia su media naranja. Aunque aún no se han visto en persona, su relación ya es firme y todo lo puede. Ahora solo nos resta desearles que pronto puedan abrazarse el uno al otro y tengan el beso que su relación tanto merece.