Las historias de cariño entre perros y niños no son nada nuevo y cada día alguien comparte alguna experiencia en una red social. Pero esta no es una historia cualquiera; es un testimonio de amor desinteresado e incondicional, y la mejor prueba de que la bondad aún existe.
Mauco es un niño de nueve años originario de Mendoza, Argentina. Hace unos cuantos días, el pequeño jugaba en la calle cuando se encontró con un perro abandonado y no dudó en llevarlo a su casa para darle atención y cuidados; más tarde lo bautizó como Rocko.
Laura Jorge, su mamá, le explicó que no tenía dinero para pagar los servicios de un veterinario que el perro necesitaba, debido a una herida que tenía en una pata.
“Mi situación económica ahora no es la misma de antes. Soy mamá separada y todo cambió. Cuando le dije que no tenía dinero para pagar a un veterinario se puso mal”, comentó Laura Jorge a la página TN.com.ar
Pero Mauco, lejos de rendirse, encontró una solución. Al día siguiente, llegó del colegio con un plan. Le pidió a su mamá que le prestara su cuenta de Facebook para publicar este texto:
“Hola soy Mauco hijo de Laura. Ella me presto su face x q yo no tengo. Miren este perrito lo encontré en la calle, esta enfermo y tiene una pata quebrada. Le damos de comer y lo bañamos. Pero necesita remedios. Vendo mi patineta para llevarlo a veterinario. Si alguien está interesado x la patineta dejen su número acá q mi mamá les llamara. Gracias. MAUCO”.
Jamás imaginó que miles de personas enviarían mensajes de solidaridad y el apoyo que recibiría para que el perro fuera atendido a tiempo. Ahora, Rocko es parte de la familia y Mauco conservó su patineta.