La ayuda siempre viene de quienes menos lo esperamos y esto lo puede testificar Juan Manuel Vidales Montero, originario de Tabasco, México, quien se vio en la necesidad de rifar su camioneta para pagar su tratamiento contra el cáncer.
El hombre estuvo dispuesto a deshacerse de sus bienes materiales para mejorar su salud, sin imaginar que el ganador de la rifa le regresaría su camioneta, pues su intensión siempre fue ayudar y no enriquecerse con la necesidad del otro. El gesto ya recorre Internet, llevando un mensaje de esperanza y empatía.
Esta historia ocurrió en Tabasco, México, específicamente en el pueblo de Huimanguillo, de donde es originario Juan Manuel Vidales Montero, un hombre diagnosticado con cáncer de estómago que ha hecho todo lo posible por seguir con vida.
Recientemente, Juan Manuel se vio en la necesidad de rifar su camioneta Chevrolet 400 SS para recaudar fondos y pagar los tratamientos necesarios. A través de Facebook, se invitó a amigos, familiares e internautas a ser parte de dicho sorteo. Después de algunos días, los boletos se agotaron y la premiación se realizó el 24 de diciembre con base en las últimas cuatro cifras del Sorteo Gordo de Navidad de la Lotería Nacional.
El hombre, con lágrimas en los ojos pero lleno de esperanza, se despojo del auto que lo había llevado a recorrer diversas aventuras y que ahora era su único medio de transporte ante la enfermedad.
De acuerdo al boletaje, el ganador de la camioneta fue Marco Polo Rodríguez Cadenas, quien acudió a la casa de Juan Manuel el día 26 de diciembre para recoger la camioneta que ganó.
El joven tomó los papeles que lo acreditaban como el nuevo dueño del vehículo y mientras era felicitado por su victoria, caminó hacia Juan Manuel y le entregó de vuelta la documentación, aclarándole que era un regalo. Juan Manuel lloró de emoción y agradeció el gesto del chico, quien mostró que su apoyo fue totalmente desinteresado.
El video fue compartido en redes sociales, alcanzando miles de reproducciones y recibiendo comentarios en los que se halaga el hermoso gesto de empatía que tuvo Marco, pues nos hizo creer en la humanidad una vez más.