Una de las mejores etapas que el ser humano puede experimentar es el estar enamorado. Cuando encuentras a la persona correcta el mundo conspira a tu favor y todo se vuelve mejor. Aunque como cualquier relación habrá momentos buenos y malos, la felicidad siempre estará presente aún en las situaciones difíciles.
Si en una relación hay dolor y sufrimiento la mayor parte del tiempo, seguramente él o ella no es la persona indicada para ti. Lamentablemente, muchas veces nos damos cuenta demasiado tarde y es por eso que terminamos con el corazón roto. Así me sucedió contigo, me enamoré de ti, me entregué y me cegué a la realidad de que tu no eras el indicado, por eso esta carta es para ti, la persona de la que me enamoré y me trato como basura.
Estimada persona que no me valoró:
Durante mucho tiempo sentí que fui como un escalón para ti. Un escalón que tenías que pisar para tratar de llegar más alto. Me has tratado terriblemente, y por alguna extraña razón, jamás pude darme cuenta de eso a tiempo. Sólo te veía como es príncipe azul al que yo le gustaba y quería estar conmigo, o al menos eso me hiciste creer. Fingiste muy bien y lograste enamorarme por completo, me convertí como en un perro fiel que te seguía a todos lados, era amorosa y 100 por ciento leal a ti.
Mis días básicamente se resumían a esperar algo de ti: un mensaje de texto, una publicación o aunque fuera un Snapchat para saber qué hacías, para saber un poquito de ti. Siempre estabas con tus amigos, y yo me quedaba esperando que llegarás y me dedicarás un poco de tu tiempo.
No importa lo mucho que yo me esforzaba para que nuestra relación funcionará, ahora me doy cuenta de que jamás iba a funcionar.
Tú no eras el chico indicado para mí porque siempre me hiciste menos. Todo el tiempo te la pasabas hablando y saliendo con otras chicas. Eras egoísta y manipulador. Sólo hacías lo que querías y lo que te convenía sin importar a quien lastimarás. Siempre terminabas aprovechándote de mí y del amor que yo sentía por ti.
Me hiciste sentir pésimo cuando me enojé y te reclamé todas esas pequeñas cosas que hacías y me lastimaban, me dijiste que estaba loca y ¿sabes? Sí, estaba loca por ti. Me tenías atrapada y no me pude dar cuenta de todas las señales que me indicaban que debía huir de ti.
Simplemente no eras para mí.
Ahora puedo entender que merezco un hombre que me respete y que me elija a mí por encima de todo lo demás. Merezco a alguien al que le pueda decir cuando me molesta algo sin que me tache de loca, alguien que me entienda y apoye. Merezco a un chico que acepte sus errores y pueda vivir con las consecuencias de ellos, que sepa pedir perdón y demostrar que puede remediar el daño que ha hecho. Tú simplemente jamás pudiste hacer eso por mí.
No me siento mal porque te hayas ido, me siento mal porque jamás pudiste ver la increíble persona que soy y el gran amor que sentía por ti.
Por supuesto que me dolió cuando terminamos, pero gracias a eso pude comprender lo que soy y, sobretodo, lo que merezco. Merezco una persona que ponga de su parte en esta relación. Merezco comunicación y honestidad. Merezco todo aquello que tu jamás me diste.
De todo corazón espero que algún día encuentres a la chica que haga que la ames y te entregues completamente, porque todas merecemos eso. Aunque me duela, sé que no soy yo. Tal vez la encuentres dentro de mucho años o tal vez mañana, sea cual sea el caso, te deseo lo mejor.
Sé que yo también encontraré a ese chico que me amé, me dé todo de él y me haga sentir increíble en todo momento.
Ahora sé que nunca volveré a perder el tiempo con tipos como tú, que me hacen sentir miserable.
Atentamente.
La chica que escapó de ti.