Hay un montón de cosas increíbles que suceden cuando estás embarazada. Tu piel se ilumina, los molestos calambres menstruales se han ido y todo el mundo está a tu entera disposición para cualquier deseo y masaje que necesites. Así que es totalmente genial.
Pero claramente, hay algunas no tan maravillosas cosas acerca de estar embarazada, ¿la número uno en la lista? Dormir. Aquí es cuando comienzan los terribles dolores de espalda, tus sueños son completas locuras y tu vejiga es aplastada por el bebé que está creciendo, así que eso te provoca levantarte cada 20 minutos al baño.
Aunque también existen algunas preocupaciones reales a las que tienes que poner atención a la hora de dormir durante el embarazo. Resulta que la posición en la que duermes es muy importante para ti y para el beneficio de tu bebé.
¿Qué posiciones tienes que evitar?
Es posible que hubieras sido una total bella durmiente antes, pero lamentablemente esos días llegaron a su fin, por ahora.
Dormir sobre tu espalda provocará que tengas grandes dolores, problemas para respirar, además que es posible que te provoque hemorroides y presión arterial baja, lo que significa que menos sangre circulara a tu corazón y al del bebé.
A medida que tu pancita siga creciendo, también te será bastante difícil dormir sobre tu estómago. Cuanto más grande sea, más incómoda se convierte la cama y comenzará a empujar a tus pechos y a tu útero.
¿Cuál es la mejor posición?
Esta posición se llama “SOS”, sueño de lado en sus siglas en ingles. Eso no significa que sólo duermas de un lado e inmediatamente pierdas el conocimiento. Se recomienda que las mujeres embarazadas duerman con sus rodillas dobladas en su lado izquierdo. Para tener un poco de apoyo útil, coloca una almohada entre tus piernas, debajo de tu abdomen y otra más en la espalda. Esto te mantendrá cómoda y en tu lugar para evitar que gires demasiado por las noches.
¿Qué hace esto por ti y por tu bebé?
Dormir de lado con una almohada entre las piernas disminuirá la cantidad de dolor que puedas llegar a sentir en tu espalda, ya que hace que la columna permanezca recta.
La elección de la parte izquierda sobre la derecha tiene un propósito también. El hígado se encuentra en el lado derecho y podría causar molestias en tu útero. Dormir sobre el lado izquierdo también te ayudará a aumentar la sangre y los nutrientes que viajan de la placenta al bebé. Por supuesto, si quieres darte la vuelta en la noche no te asustes. Mereces un buen descanso.
Hay otra opción
¿Aún continuas incómoda? Otra recomendación es que si sufres de acidez estomacal debes dormir como si estuvieras sentada. Una vez más esta podría ser una posición incómoda en cualquier otro momento, pero el embarazo pone en evidencia las cosas más extrañas.
Para esta posición semi-sentada, puedes apoyar tu espalda en unas cuantas almohadas. No importa lo que utilices, ten en cuenta de que estos consejos son para que tú y tu bebé obtengan un merecido descanso.