Cuántas veces hemos dicho: “¿en qué te puedo ayudar?”. Ofrecer ayuda a alguien en necesidad es una gran forma de hacer sentir bien al que recibe, pero también al que otorga; y una mamá con bebé recién nacido es la candidata perfecta para recibirla, en especial las primerizas.
Si le preguntas a tu amiga (la nueva madre) cómo la puedes ayudar, quizá no se le ocurra nada, pero sí hay mucho que puedes hacer por ella y su familia que realmente les facilitará el proceso de adaptación, por lo menos durante el primer mes de la llegada del bebé.
1. Evita la visita al hospital
Aguanta las ganas de ir al hospital a conocer al bebé, a menos que seas la persona que por acuerdo previo ayudará a la mamá durante su estancia; de lo contrario, deja que el personal a cargo apoye a la familia. No hay nada más incómodo que recibir visitas cuando sientes que acaba de pasar una aplanadora sobre tu cuerpo.
2. Lleva comida que les va a gustar
Averigua qué comida que les gusta, principalmente a mamá y papá, y llévala cuando vayas de visita. Puedes cocinarla o comprarla, el chiste es que incluso puedan tener comida guardada en el congelador para poder aminorar la carga de trabajo que se adquiere al tener al bebé en casa. Pueden organizarse entre amistades y familiares para que lleven alimentos cada tercer día por un par de semanas.
3. Ten iniciativa
Si le preguntas a alguien que visitas si le puedes ayudar en algo, lo más probable será que te diga que no, a pesar de que en su interior casi suplique la ayuda; así que ahorra la pregunta y ten iniciativa, busca algo que puedas hacer mientras estás de visita y hazlo.
4. Ayuda con los otros niños
Si ya hay niños en el hogar, puedes apoyar recogiéndolos de la escuela o llevándolos a sus actividades vespertinas, incluso invitándolos a disfrutar de una tarde en el cine o el parque para que evitar que se sientan desplazados o desatendidos.
5. Échales la mano con la limpieza
En casa nunca se acaban las tareas y menos aquellas que están relacionadas con la limpieza. Puedes lavar los trastes, dar una barrida, meter ropa a la lavadora o doblar la que ya ha salido de la secadora.
6. Ofrécete a cuidar al bebé
Puedes quedarte por un par de horas con el bebé para que mamá tomé un baño relajante, duerma un rato o salga aunque sea al supermercado o a dar una vuelta.
7. Ayuda con los pendientes
Puede ser que entre el papá y tú realicen los pendientes, como ir al supermercado, pagar cuentas o hacer trámites; incluso si andas en la calle, puedes marcarle a la mamá para preguntarse si se le ofrece algo.
8. Regala algo útil
Si piensas llevar un regalo para la mamá o el bebé, no está mal que les preguntes qué les hace falta porque a veces sucede que todo el arsenal de ropa que tenían para el bebé ya no es útil por la talla o por la temporada.
9. Consiente a la mamá
Puedes ponerte de acuerdo con el papá para que se quede por unas horas con el bebé y lleves a la mamá al salón de belleza para un corte de pelo o una manicura o a comer algo a su restaurante favorito; esa salida la hará descansar y se sentirá menos abrumada.
10. Escúchala
Una llamada telefónica para saber cómo está o si necesita algo, puede ser un gesto agradable. Pregúntale cómo está, escucha, platiquen de todo como antes de tener al bebé para que no se sienta fuera de la ecuación y si ya eres mamá, puedes darle algunos consejos.