Durante tres décadas, Salma Hayek ha demostrado que es una grandiosa actriz. Además, se ha mantenido como uno de los sex symbols más importantes del mundo, pero hablemos de su interés por la moda.
Desde que inició su carrera, su pasión por la moda fue evidente. En los 90 resaltó su lado más sensual vistiendo atuendos de diseñadores independientes, pues muchas marcas de lujo no estaban dispuestas a vestirla, pero conforme el tiempo avanzó, logró demostrar que podía verse elegante en cada alfombra roja sin importar lo que usara. Ahora Salma es el foco de atención de los fotógrafos y los diseñadores pelean por vestirla, por eso tenemos que recordar los momentos que la llevaron a convertirse en un ícono del estilo.