En México, al igual que en algunos otros países de América Latina, se acostumbra la celebración de la quinceañera, el cumpleaños número 15 de las mujeres a manera de iniciación social, en el que las familias suelen invertir recursos para tener fiestas con música en vivo, comida y detalles para recordar. Pero Sarahí García, una joven de Matamoros, Tamaulipas, decidió cambiar el tradicional festejo por una acción que se hizo viral: llevó comida a los familiares de pacientes hospitalizados en una unidad médica de su ciudad.
Portando en su cabeza la tradicional tiara de las quinceañeras y un corset decorado para fiesta, Sarahí llegó al hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social y, junto a su madre Brenda Briseño, repartió comida entre las personas que pasan días y noches afuera del centro médico esperando a sus familiares internados por algún problema de salud.
Su acción fue agradecida por los familiares de los pacientes, pero en redes su determinación de festejar con esta labor altruista su cumpleaños recibió el reconocimiento y admiración de personas de todo el mundo.
Dejando de lado la tradición de celebrar una misa y posteriormente encabezar la fiesta en la que recibe regalos, baila un vals y comparte la cena, bebidas y pastel con cientos de invitados, en un gesto de generosidad Sarahí García prefirió ayudar a quienes pasan por un momento difícil con un familiar internado y permanecen a la intemperie en las afueras del hospital mientras reciben noticias o esperan mejoría en el paciente.
Pero este caso no es el primero que se ha registrado en Tamaulipas. En septiembre del 2018, Karyme Hernández, originaria de Brownsville, Texas -de ascendencia mexicana-, celebró su cumpleaños número 15 llevando también comida y refrescos a los familiares de pacientes del IMSS de la calle Sexta de la ciudad de Matamoros.
En el caso de Karyme la fiesta sí se llevó a cabo, pero al final de la misma decidió compartir parte del festín servido en el evento con quienes estaban en espera de sus seres queridos en la unidad médica. La jovencita apareció aún con su vestido rosado y su tiara para realizar la entrega.
Según dijo a quienes la criticaron por “llevar las sobras” de su banquete para compartir, sus padres solicitaron una cantidad mayor de platillos para que ella pudiera llevarlos a estas personas que pasan por un difícil momento y no solamente con quienes fueron convocados a su festejo.