La historia de María Lorena Ramírez, la joven rarámuri que gana ultramaratones internacionales llevando la vestimenta típica de su etnia y huaraches tejidos -sandalias- de piel, será plasmada en un episodio de la serie Río Grande, Río Bravo que Netflix lanzará con crónicas de la vida en la frontera entre México y Estados Unidos.
La comunidad indígena rarámuri, o tarahumara, está asentada al norte de México, principalmente en la zona serrana del estado de Chihuahua. El significado de rarámuri es “el de los pies ligeros” o “corredores de a pie”, lo cual podría explicar la innata facilidad de Lorena para correr largas distancias en poco tiempo.
Según dio a conocer la popular plataforma de streaming durante el Foro: un evento original de Netflix, Río Grande, Río Bravo es una serie documental de cinco capítulos en los que participarán Gael García, como productor ejecutivo, y la producción de Elena Fortes y Daniela Alatorre, así como la participación de Trisha Ziff, Juan Carlos Rulfo y Everardo González. Cada capítulo de la serie que incluirá como temática eventos históricos, crimen, deporte y gastronomía tendrá un director diferente.
Entre las carreras en las que ha destacado María Lorena se encuentran el Ultramaratón Caballo Blanco 2016, realizado en Chihuahua, en el que obtuvo el segundo puesto; el Ultra Trail Cerro Rojo, en Tlatlauquitepec, Puebla, que ganó recorriendo 50 kilómetros en un tiempo de siete horas con 20 minutos; el Ultramaratón de los Cañones, en su natal Guachochi, Chihuahua, en el que obtuvo el primer sitio en 2017 y el segundo en 2018; así como el Cajamar Tenerife Bluetrail 2018, en el que se colocó en tercer sitio.
Lorena Ramírez, hoy con 24 años de edad, vive en la comunidad de Rejocochi en donde cuida el ganado de su familia recorriendo 10 kilómetros diarios para llevarlos a pastar y regresarlos por la noche a los corrales, ese es su entrenamiento diario. La Sierra Madre Occidental es el hogar de los rarámuris y el mejor preparador para las carreras, ya que -incluso sin calzado- muchos de ellos caminan o corren por horas para comunicarse.