Una hermana comparte su sangre contigo y está evidentemente conectada a ti. Cuando es la mayor, ha estado ahí desde el principio, cuando eras sólo una niña inocente que no entendía los chistes de las películas de “mayores”.
Te conoció antes de que fueras genial y aún así encontró la manera de que le gustaras.
Tener una hermana es como tener un mejor amigo de mayor edad que vive en la misma casa que tú. No sólo hace que las fotos familiares se vean alegres y completas, también hace que tu vida sea así.
Una hermana mayor es, y será por siempre, el mejor regalo que tus padres te pudieron haber dado.
1. Te dejó entrar en “el mundo de adultos”
Gracias a ella pudiste enterarte de todas aquellas insinuaciones sexuales de la película “Clueless”. O qué turbio suceso familiar ocurría en la cocina después de la cena (y no era el postre).
2. Te ayudó a construir tu carácter
Esa vez que sus amigos fueron a tu casa y ella te cerró la puerta en la cara, o cuando tu mamá los obligó a incluirte en el juego de las escondidas y nadie te encontraba a propósito, en realidad eran momentos en que tu carácter se estaba formando.
3. Con ella puedes tener conversaciones profundas
“Quítate mis malditos zapatos ahora pedazo de m**da, antes de que los hagas grandes con tu enorme pie de orangután”.
¿Con quién más podrías tener esta clase de conversación?
4. Te ayudará a conseguir oportunidades de empleo
Tener una hermana significa tener una extensa red de sus conexiones profesionales bien desarrolladas. Sus amigos pueden ser probablemente tus supervisores inmediatos, por lo que tendrás una ventaja cuando se presente una oportunidad de trabajo.
5. Te da los consejos de moda más honestos
Ya que eres una representación tanto de tu éxito genético como del de tu hermana, puedes estar segura de que nunca te dejará salir a la calle luciendo como “Clarissa lo explica todo”. Y si la encuentras de buen humor, hasta podría ofrecerte su propia ropa.
6. Suavizó a tus padres
El hecho de que hayas llegado tarde a casa porque te quedaste bebiendo alcohol con tus amigas, no es tan grave en comparación con la vez que tu hermana se escapó de casa. Su época de rebeldía preparó a tus papás para cuando te llegará el turno de crecer.
7. Puedes descargar tu enojo en ella
Mientras que casi todos tus amigos te odiarían por esto, tu hermana no tiene más alternativa que seguirte amando.
8. Es muy responsable
Siempre podrás contar con ella para comprarle el regalo de cumpleaños a tu mamá (primero te recordará que es su cumpleaños). Y como tus padres la nombraron tu niñera oficial, ella está acostumbrada a cuidarte.
9. Te deja perturbar la tranquilidad de su casa
Las pijamadas entre hermanas son las mejores. Puedes usar su maquillaje, probarte su ropa y asaltar su cocina. Es lo más parecido a estar de vacaciones.
10. Te lleva por todas partes en la escuela
Te hizo ser la envidia de algunos porque andabas con los más grandes. Además, los maestros ya la conocían y la adoraban. Siempre le ponían buenas calificaciones y por lo tanto también te amaron a ti.
11. Se queda callada
Cuando llegas sospechosamente tarde a casa y pasas a comer todo lo que encuentras en el refrigerador.
12. Mejora el apellido familiar
Para ella es importante dar un buen ejemplo, ya que la mayoría de las personas se referirán a ti como “la hermanita de…”
13. Puedes duplicar tu colección de todo
Tener una hermana significa que tendrás el doble de todo. Compartir, por otra parte, es otro tema.
14. Es la persona a quien imitas
Ella es la que te enseñó casi todo lo que sabes, desde cómo mandar al demonio a esa niña que te molestaba en el recreo hasta como rizarte el cabello. La verdad es que te gusta recibir sus “sobras” porque en secreto siempre pensaste que ella era mejor que tú.
15. Es el gurú de tu vida
Tu hermana es quien te da los mejores consejos porque, alguien que tiene la misma sangre que tú, ten por seguro que será quien más se preocupa por lo que te pasa.
16. Es la única persona con la puedes criticar a la familia
Por supuesto que puedes desahogar tus conflictos familiares con tus amigos, pero sería muy incomodo para ellos decir algo como: “Sí, tu madre es un caso”. Por otro lado, tu hermana lo comprende mejor que nadie.
17. Te apoya incondicionalmente
Cuando nadie compra lo que estás vendiendo, o ya no causan gracia tus payasadas, aparece tu hermana.
18. Pueden jugar a la casita
En realidad, sólo cuando eran niñas. Ahora, en sentido figurado, cuando ella te invita a cenar y te pone lo que te gustó para tu almuerzo del día siguiente.
19. Tus padres las dejan hacer actividades que las unen
Les dan dinero para salir a bailar, a un bar, a donde sea, siempre y cuando pasen vayan juntas.
20. Te da los mejores consejos sobre hombres
“Coquetea con alguno de mis amigos solteros y te mato”.