Constantemente somos testigos de la crueldad en la que viven algunos perros y gatos sin hogar debido a la falta de responsabilidad de quienes fueron sus dueños. Sin embargo, por cada acto de maldad existen tres más de bondad y precisamente son estos los que reconstruyen nuestra fe, tal y como lo hizo el ciclista brasileño Vittor Fonseca.
Hace unos días, salió a dar un paseo con un amigo, sin imaginar que el destino le tenía guardada una sorpresa de cuatro patas para alegrar su vida.
Los héroes aparecen en el mejor momento
Durante su paseo en bicicleta, Fonseca vio a un pequeño gatito atigrado en apuros, se acercó un poco y notó que el minino no podía valerse por si mismo, maullaba con gran intensidad y claramente estaba solo.
Vittor sabía que no podía dejarlo abandonado y decidió llevarlo con él, pero no tenía donde colocarlo, así que rápidamente opto por esconderlo dentro de su jersey, situación que llenó de seguridad y afecto a su nuevo amigo quien solo se acurrucó en su pecho para disfrutar del viaje de 10 kilómetros.
La mejor de las recompensas
Como muestra de agradecimiento el pequeño minino comenzó a llenar de caricias en el cuello y la barbilla a su salvador, logrando que el ciclista sonriera todo el tiempo.
Fonseca compartió su experiencia y video en redes sociales, donde recibió todo tipo de comentarios a favor de su gran acción.
“Todo lo que hacía era jugar, me alegro que esté bien, y si se lo preguntaban, no me estaba arañando”.
Y un compañero de aventuras
Ahora que este gatito se encuentra en un nuevo hogar, recibe mimos y amor como parte de su entrenamiento básico para el próximo viaje en bicicleta.