En el mundo existen dos tipos de personas: quienes aman a los animales y las que son indiferentes a ellos, es decir, nunca tendrían una mascota en casa pero los respeten como seres vivos. Esto es algo que debemos respetar, pues no todos somos ni pensamos igual.
Precisamente alguien del segundo grupo comenzó a quejarse de un minino que deambulaba dentro de las oficinas de un reconocido bufete de abogados en Brasil. La queja llegó hasta el Departamento de Recursos Humanos, que puso fin a la discusión, adoptando al minino y convirtiéndolo en miembro oficial del equipo.
En el OAB (un Colegio de Abogados ubicado en Brasil), los visitantes del lugar comenzaron a presentar quejas por un pequeño gato que paseaba por la recepción del lugar.
El minino llegó al sitio en busca de un refugio tras las fuertes lluvias que azotan el país. Pero al ser recibido cálidamente con agua y algo de alimento, decidió hacer del recinto, su nuevo hogar. Los empleados lo trataban como un igual y no tenían problema con él. Sin embargo, quienes acudían por servicios legales no opinaban lo mismo.
Para resolver el problema, el personal encargado de Recursos Humanos se dio a la tarea de contratar de manera oficial al minino, al que le dieron el nombre de Dr. León e incluso le otorgaron una identificación personal con número de empleado. Además, fue incluido en la nómina con un pago de techo garantizado, caricias y atún suficiente por el resto de su vida.
Hace dos meses León fue castrado y ya está completamente recuperado. Pero los veterinarios dicen que tuvo un problema con sus cuerdas vocales como resultado de sufrir cuando era un bebé. Apenas maúlla, pero seguimos cuidando de él. Esto nos motivó a crear el instituto Dr. León, para ayudar a los animales maltratados y abandonados.
Los hechos fueron compartidos en redes, ganando la atención de miles de internautas, quienes aprobaron la acción del bufete de abogados.