Después de cuatro meses de haber quedado inconsciente debido a la posible ejecución de un reto viral, el niño Archie Battersbee, de 12 años, falleció, este 6 de agosto, en el Hospital Royal London. Fue la familia del menor quien confirmó su muerte.
Recordemos que el reto viral al que se le sugiere el deceso es el blackout challenge o desafío del apagón, que se ha ido extendiendo entre la población más joven en TikTok. El pasado 7 de abril, Hollie Dance, madre de Archie, lo encontró inconsciente en su casa, en Southend, Inglaterra, con una cuerda enredada alrededor de su cuello, por lo que se sospecha que pudo ser el resultado del intento de este absurdo y peligroso trend.
El caso de Archie fue muy popular no solo por la causa de su muerte cerebral, sino por todo el proceso legal que surgió a partir de que el joven perdió el conocimiento. Su familia comenzó a interceder para que no fuera desconectado, ya que los médicos especialistas consideraron que el soporte que lo mantenía con vida era contrario a la dignidad y éticamente preocupante, por lo que sugerían que debido a la inactividad cerebral, lo más adecuado sería desconectarlo.
No obstante, sus padres no estuvieron de acuerdo con las conclusiones médicas y con el apoyo de una organización evangélica apelaron a diferentes instancias judiciales para mantenerlo con vida. Sin embargo, los tribunales concedieron la razón al hospital incluida la autorización para desconectarlo del soporte vital.
La madre del niño declaró que el futuro de su hijo no debía depender de la decisión del hospital ni de un tribunal, sino que debía recaer en sus padres, pues su corazón latía y ella deseaba dejarlo a la voluntad de Dios.
Sin embargo, el pasado mes de junio, durante la audiencia de tres días, los especialistas aseguraron que las diferentes pruebas realizadas al niño no habían mostrado actividad cerebral perceptible.
Por tal motivo, basándose en las imágenes de la resonancia magnética realizada el pasado 31 de mayo, que arrojaron que el daño era irreversible, la jueza encargada del caso concluyó que Archie murió ese día, por lo que el hospital tuvo la autorización legal de dejar de suministrarle ventilación asistida al niño.
A pesar de los intentos de la familia para apelar el fallo del tribunal, solicitando que Archie fuera trasladado a un hospicio, además de varios recursos legales y la intervención del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, no tuvieron éxito y, finalmente, este 6 de agosto Archie Battersbee fue desconectado de su soporte vital.