Los terremotos ocurridos a principios de febrero en Turquía y Siria no sólo dejaron a su paso graves daños en edificios y construcciones de ambos países, también acabaron con las vidas de decenas de miles de personas, generando un sinfín de devastadoras y trágicas historias de familias que además de haber sufrido la muerte de un integrante, aún cuentan con algún familiar desaparecido, impidiendo reunir a cada uno de sus miembros.
Sin embargo, al parecer, no todo es desilusión y tristeza, ya que, poco a poco, siguen surgiendo casos de familias que se han reunido de nuevo. Tal como el emotivo reencuentro de una madre que tras 54 días sin saber de su bebé, al fin pudo tenerla de nuevo entre sus brazos.
El caso que trae esperanza a todos los afectados por los devastadores terremotos corresponde a una mujer llamada Yaseming Besdag y su pequeña hija de apenas un mes y medio de vida, quien se encontraba bajo el cuidado del Estado Turco tras ser encontraba bajo los escombros de un edificio derrumbado.
La menor, que es conocida como una de los llamados “bebés milagro”, logró sobrevivir 128 horas bajo los restos de una construcción en la que fue encontrada por rescatistas con heridas leves, para luego ser puesta al cuidado del Servicio Social de la República de Turquía, donde se encargaron de ella pensando que era huérfana, ya que llegaron a creer que su madre había muerto enterrada tras el derrumbe.
Sin embargo, la historia en la vida de Gizem, como la menor fue llamada por la dependencia bajo su cuidado, dio un inesperado giro luego de que una familiar se presentó ante las autoridades buscando a una niña que contaba con sus características. Tras una prueba de ADN, se comprobó que la pequeña no sólo tenía familia, sino que su madre estaba con vida.
Ante todo el caos ocasionado por los terremotos, Yaseming tuvo que ser trasladada a un hospital para ser atendida, situación por la que le perdió el rastro a su bebé hasta que su familiar logró dar con el paradero de su hija y consiguió que, a casi dos meses de estar separadas, pudieran reencontrarse por primera vez.
Ser testigos de su felicidad también es un momento emotivo y hermoso para nosotros. Unir a una madre con su hija es uno de los actos más preciados del mundo.
– Derya Yanik, Ministra de Familia y Servicios Sociales de la República de Turquía
La adorable historia y el emotivo video del reencuentro de esta madre con su hija fue compartido en las redes sociales de la Ministra de Familia y Servicios Sociales de la República de Turquía, quien se dijo emocionada por haber sido testigo e influir en tan hermoso reencuentro.