El pasado 17 de febrero, en casi todo el país celebramos la noticia de la aparición de Chavita, un joven de 17 años que fue sustraído al día siguiente de su nacimiento por una mujer que se hizo pasar por enfermera en el estado de Jalisco, en México, y que hasta hace unos días se desconocía su paradero.
Justamente el 13 de diciembre, día en que Chavita cumplió sus 17 años, la Fiscalía de Jalisco anunció la captura de Esther Alejandra S., la mujer que se hizo pasar por personal de la clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), mejor conocida como Hospital Ayala de Guadalajara, para entrar a la habitación de la madre del menor y llevarse al recién nacido con el pretexto de realizarle algunos estudios médicos.
En diciembre del 2005, la señora Rosalía López señaló que el personal del hospital presentó a la mujer como parte del equipo médico, pero cuando su hijo desapareció, tanto enfermeras como el pediatra dijeron desconocerla.
Durante 16 años, Yasir Macías y Rosalía, padres de Chava, no se dieron por vencidos hasta encontrarlo y a pesar de que presentaron la denuncia ante la Fiscalía del Estado, no hubo el seguimiento necesario por parte de esta, así que ellos no cesaron en la búsqueda en todo este tiempo.
Hace un año, la madre del joven pidió a un perito especializado que realizara una proyección animada de cómo sería su hijo en la actualidad y debido a esa imagen digitalizada, que se difundió a través de las redes sociales, así como a la colaboración de la ciudadanía, lograron dar con el menor.
De manera anónima, los padres recibieron una carpeta de fotografías e información sobre la ubicación de un muchacho que podría ser su hijo perdido, así que acudieron a la Comisión de Búsqueda de la Policía de Zapopan y luego de las pruebas genéticas, que coincidieron en un 99.99 por ciento, lograron encontrar a su hijo.
Ahora, con la reciente captura de la mujer, se tiene entendido que ha quedado a disposición del juez por el delito de robo de infantes, ante el que deberá responder. Cabe mencionar que la responsable del crimen no ha declarado las verdaderas intenciones del hurto.