Por primera vez en la historia. científicos lograron cultivar semillas en el suelo de la Luna, proveniente de muestras recuperadas durante las misiones de la NASA de 1969 y 1972. El innovador estudio es el primer paso hacia el cultivo de plantas para alimento y oxígeno en futuras misiones espaciales.
Investigadores de la Universidad de Florida plantaron semillas de la planta Arabidopsis, una pequeña planta con flores nativa de Eurasia y África, en pequeñas muestras del suelo lunar recolectado durante las misiones Apolo 11, 12 y 13.
Según un artículo que detalla el experimento publicado por la revista científica Communications Biology, después de aproximadamente una semana de riego y fertilizante las semillas crecieron dentro y fuera del regolito lunar.
El crecimiento exitoso de la planta marca un hito importante en la exploración lunar y espacial al dar pie a cultivos que podrían sustentar a futuras tripulaciones humanas. Aunque es importante señalar que, al investigar la respuesta biológica de las plantas en el sustrato lunar, se observó que presentaron estrés y crecimiento atrofiado en comparación con sus contrapartes plantadas en la Tierra.
El experimento, que tardó años en realizarse, fue posible gracias a que el Programa Artemis de la NASA se está preparando para regresar a los humanos a la Luna en 2025. Los dos investigadores principales del experimentó, Anna-Lisa Paul y Robert Ferl, solicitaron el uso del suelo lunar cuatro veces durante once años, antes de que su solicitud fuera aprobada por la NASA.
Si bien la científica principal de la NASA, Sharmila Bhattacharya, elogió los recientes hallazgos del experimento, hizo énfasis en que aún queda mucho trabajo por hacer, aunque dijo que el estudio presenta muchas oportunidades de seguimiento para los científicos que planean realizar estudios para comprender cómo el cultivo de plantas podría alterar el suelo de la Luna.
Sin embargo, el crecimiento de las semillas en el suelo lunar es el primer logro de este tipo y se remonta a lo que motivó a científicos como Paul y Ferl a interesarse en la ciencia gracias a las primeras misiones a la Luna.
Hay que recordar cuando éramos niños, observábamos cómo se recogían estas muestras. las veíamos en la televisión y, por lo tanto, ser parte de este legado, aunque sea una pequeña parte, es extraordinario.
– Anna-Lisa Paul