Todo es risa y diversión cuando viajamos con nuestras amigas, hasta que a una de ellas le ocurre o hace algo. Así como le pasó a un grupo de amigos que viajó a un pueblo cercano de Medellín, Colombia, y al ingerir hongos alucinógenos, uno de ellos se “mal viajó” de tal modo que hasta terminó acusado de secuestro.
Esta historia la conocimos por la usuaria KatVour, quien en su cuenta de Twitter reveló la anécdota de un viaje, cuyo propósito era pasarla bien. Así fue mientras todo transcurría normalmente. Sin embargo, se descontroló al querer vivir la experiencia “al máximo”.
De acuerdo con Kat, el grupo de amigos se fue a un pueblo cercano y se hospedaron en un hotel. Para pasar el rato decidieron salir a divertirse por la noche y en medio de la fiesta tuvieron un encuentro con los alucinógenos. Sin embargo, conforme pasó el tiempo, uno de ellos se alejó de los demás y cuando se había pasado el mal viaje alucinógeno, decidieron buscarlo, pero no lo encontraron.
Después de estarlo buscando por un rato, decidieron volver al hotel. Al llegar, se encontraron con su amigo, quien los esperaba en la puerta de la habitación, con una sonrisa y felicidad muy sospechosa.
Al recibirlos, les confesó, entusiasmado, que había encontrado y capturado a un duende con el fin de que lo llevara a ¡la olla del tesoro! Por supuesto, los amigos lo tomaron con gracia y creyeron que solo bromeaba. Sin embargo, cuando entraron a la habitación, el joven abrió el closet y descubrieron que su fantasioso amigo había ¡encerrado a una persona con enanismo!
Todos se sorprendieron al ver que el “mal viaje” provocó estos efectos en el chico y después de liberar al sujeto, él procedió a denunciar al muchacho “malviajado” por secuestro.
En su relato, Kat no explicó qué ocurrió al final con la demanda, pero de que es una historia graciosa para los que presenciaron el momento sí que lo es y, claro, para nosotras como espectadoras también, pero tal vez aquel sujeto víctima de un “mal viaje” no piensa lo mismo.
Afortunadamente, su viaje alucinógeno no tuvo pésimas consecuencias, pero sí es importante saber que algunas de las reacciones a las sustancias psicotrópicas no siempre son favorables. De hecho, farmacólogos de la Universidad Johns Hopkins, en Baltimore, Maryland, Estados Unidos, realizaron un estudio para establecer qué efectos tiene un “mal viaje” en los seres humanos.
De acuerdo con la información dada por la universidad, el 2.6 por ciento de las 1993 personas entrevistadas experimentaron comportamientos agresivos y violentos y un 2.7 por ciento de los casos fue necesaria la asistencia médica.
Además, el casi 11 por ciento de los encuestados declararon que pusieron en peligro su salud y la de otras personas. Tal como le ocurrió al amigo de Kat, quien puso en riesgo no solo su integridad, sino también la de otra persona que ni la debía ni la temía.