Seguramente, ustedes recuerdan la primera adaptación hecha película de Matilda, una bella obra y un clásico de Roald Dahl, que nos dio personajes inolvidables como Tronchatoro, los papás de Matilda y, por supuesto, la señorita Miel.
Sin embargo, ahora con la nueva adaptación de Netflix han surgido algunas polémicas entre los televidentes, quienes han dado diferentes opiniones por no estar conformes con el reparto e incluso han debatido y compartido que, para muchos, la señorita Miel de la versión de 1996 fue un ícono gay.
Según los internautas, para algunas chicas fue su “despertar lésbico”, mientras que otros asumieron que era lesbiana por su independencia y por no tener novio o esposo. Claro que esto no significaría que todas las mujeres que son independientes y que no tienen novio o esposo son gay, pero los usuarios llegaron a esa conclusión y la nueva señorita Miel, interpretada por Lashana Lynch, reconoció esto.
La actriz explicó que “no era algo de lo que estuviera al tanto”, pero que una amiga queer le dijo que, en efecto, la dulce maestra de Matilda de la primera adaptación fue como un ícono gay cuando ella creció.
Esto le llamó mucho la atención porque creyó que podía ser importante para desarrollar su nuevo papel. Además, Lashana afirma que en la versión de Netflix la señorita Miel se propuso como un personaje con el que todos se sintieran representados sin importar raza, género u orientación sexual.
Varios de los fanáticos, en su mayoría queer, comenzaron a afirmar en redes sociales lo importante que su figura fue para ellos en su infancia.
Como generación, crecimos con el entendimiento tácito de que era una lesbiana clásica porque vivía sola y claramente era muy inteligente para que le gustaran los hombres.