Después de tener años complicados tanto en su vida profesional como personal, la cantante británica Adele afirmó sentirse muy enamorada de su novio Rich Paul, un agente deportivo estadounidense.
En una entrevista que ofreció para la revista Elle, la artista compartió lo afortunada que se siente en esta relación. Además, la intérprete de Hello afirmó que aunque acaba de pasar por un duro divorcio, sigue creyendo en el matrimonio e incluso quiere tener más hijos.
Soy ama de casa y soy matriarca, y una vida estable me ayuda con mi música. Pero en este momento, todo lo que tengo en mi cerebro es: mi próxima residencia en Las Vegas.
Recordemos que Adele y Rich fueron vistos juntos por primera vez en un partido de la NBA en julio del año pasado y una fuente le confirmó a la revista People que la artista había estado saliendo con el agente deportivo durante unos meses.
En febrero de este año surgió el rumor de un compromiso cuando la cantante fue vista con un anillo de diamantes en su dedo anular en los Brit Awards. Además, días después en su participación en The Graham Norton Show, Adele vaciló con el presentador al hacer referencia al gran diamante que llevaba puesto, a lo que ella solo se limitó a decir que el anillo era encantador.
Sin embargo, en la revista Elle se volvió a abordar el tema de aquellos rumores y la cantante afirmó no estar casada ni comprometida pero sí muy enamorada.
Nunca he estado enamorada así. Estoy obsesionada con él.
En cuanto al anillo, solo se trata de un lujo que ella solita se pudo haber dado, pero los curiosos han insistido de tal manera que la intérprete de Rolling in the Deep externó que le encantan las joyas de gama alta.
El amor está en el aire para Adele, ya que hace un mes fue vista tomando unas románticas y placenteras vacaciones en Porto Cervo, Italia, en compañía de Rich Paul. De estas vacaciones también habló en la entrevista y dijo haberle confesado a su novio que a pesar de siempre haber querido viajar a las islas italianas, le preocupaba encontrarse con un paparazzi. Sin embargo, el agente le mostró todo su apoyo y le hizo ver que eso no debía ser impedimento para ir y disfrutar el lugar. ¡Y vaya que lo disfrutaron! ¡Ah, que viva el amor!