Una nueva polémica golpea a Kanye West o, mejor dicho, al rapero y productor estadounidense ahora llamado Ye, quien lleva semanas en el ojo del huracán tras protagonizar una serie de polémicos episodios.
Luego de que el artista de 45 años sacara a la venta ropa con la leyenda “White Lives Matters” (“Las vidas blancas importan”) en una especie de burla al movimiento antirracismo Black Lives Matters (Las vidas negras importan) y de que hiciera comentarios en contra de los judíos, siguiendo el ejemplo de Balenciaga, Adidas decidió romper relaciones con efecto inmediato con el intérprete de Stronger.
A través de un comunicado emitido este 25 de octubre, la marca alemana de ropa deportiva anunció oficialmente la ruptura comercial con Kanye West:
Adidas no tolera el antisemitismo y cualquier otro tipo de discurso de odio. Los comentarios y acciones recientes de Ye han sido inaceptables, odiosos y peligrosos y violan los valores corporativos de diversidad e inclusión, respeto mutuo y equidad.
Además, Adidas declaró que estima que el fin de la sociedad con Yeezy (marca de Kanye) impactará negativamente en la ganancia neta de la empresa en 2022, específicamente, con 250 millones de dólares, aunque agregó que espera que la caída sea breve.
Tras la ruptura de la relación comercial entre el rapero y la marca deportiva, las ventas y la producción de los productos Yeezy se detuvieron, así como los pagos a sus empresas.
Cabe mencionar que Adidas declaró anteriormente que la asociación con Kanye tenía un impacto significativo en las actividades comerciales de la marca debido a que es una de las relaciones más exitosas de su historia.
Aun así, en los últimos meses, el ex de Kim Kardashian se ha dedicado a criticar públicamente a la compañía, así como a otras marcas importantes con las que tiene acuerdos comerciales, incluida Gap.
Recientemente, Ye le dijo a CNBC que Adidas copia sus ideas. Además, a menudo se quejaba de la marca en las redes sociales, en especial del director ejecutivo Kasper Rorsted y otros miembros de la gerencia.
Si otras marcas adoptan las mismas políticas de Balenciaga y Adidas, la situación parece complicada para Kanye, quien, según el portal estadounidense TMZ, habría recurrido al conocido bufete de abogados Brown Rudnick, del que Camille Vásquez, la abogada de Johnny Depp en el juicio contra su ex Amber Heard, forma parte, con el fin de gestionar sus “intereses” después de sus recientes rupturas comerciales.