La sociedad está acostumbrada a que la mujer sea quien se encargue del hogar y el cuidado de los hijos para que el hombre se desempeñe laboralmente sin problema alguno. Sin embargo, la actriz Amy Adams y su esposo Darren Le Gallo intercambiaron los papeles, dándole al mundo una gran lección de amor, respeto y compromiso.
La pareja se conoció mientras ambos estudiaban actuación, y aunque ambos tenían la misma aspiración, solo la protagonista de Encantada logró llevar su carrera a la cima del éxito. Lejos de sentir celos, Darren le demostró todo su apoyo. Renunció a su trabajo y se dedicó de tiempo completo al cuidado de su hija y las labores del hogar, así Amy podría concentrarse de lleno en su sueño.
Amy siempre ha agradecido el gran gesto de amor que Darren tuvo hacia ella, pues no cualquier hombre se atrevería a dejarlo todo por ver a su amada materializar sus sueños.
Él no es competitivo conmigo. Tiene un talento maravilloso, y no hay mucha gente en el mundo que sea así, donde no ve mi éxito como su fracaso.
Él ha sacrificado mucho. Pero viaja conmigo y ayuda a mantener a la familia unida, realmente lo aprecio. Pero no lo valoro porque es un hombre que lo hace, lo valoro porque es mi compañero. Mi marido es un cuidador extremadamente competente.
A pesar de que alguna vez tuvo el mismo sueño que su esposa, Darren suele mantener un perfil bajo, alejado de las cámaras y deja que Amy sea quien brille sobre y bajo el escenario.
Con 20 años de relación, esta pareja ha demostrado que el intercambio de roles es posible y, por supuesto, que la admiración, respeto y amor que tienen el uno por el otro es su motor para seguir adelante.