Celebridades como Ricky Martin, Cristiano Ronaldo, Leonardo DiCaprio, Camila Cabello, y personalidades de la política mundial como el presidente de Francia Emmanuel Macron, visibilizaron en redes sociales el incendio activo en la selva del Amazonas para demandar atención a la emergencia, que incluso algunos calificaron como crisis internacional.
A pesar de que algunos de ellos cometieron errores con las imágenes utilizadas, ya que se trataba de fotografías tomadas en desastres naturales ocurridos en otro tiempo y lugares, lograron posicionarse con el tema y llamar la atención a escala internacional.
Cristiano Ronaldo, por ejemplo, eligió una tomada por John McColgan en Montana, Estados Unidos, en el año 2000, para ilustrar su tuit en el que utilizaba el hashtag #PrayForAmazonia, que fue la principal tendencia global en Twitter el 21 de agosto. Igual sucedió con Leonardo DiCaprio, Emmanuel Macron, Madonna y Ricky Martin, por mencionar algunos cuya buena intención para pedir acción contra el incendio -hasta hoy sin sofocarse- se vio empañada por señalamientos respecto a sus involuntarios errores.
En el caso de DiCaprio, el actor deploró la deficiente cobertura sobre el incendio y destacó que se trata del hogar de un millón de indígenas y tres millones de especies animales; “el Amazonas necesita más que rezos”, escribió antes de proponer algunas acciones en respaldo a la zona.
Camila Cabello también emitió un mensaje en el que expresó su frustración ante el suceso e incluso se disculpó con el planeta por la destrucción que el ser humano causa:
Es desgarrador y aterrador. Me dan ganas de llorar de frustración. ¿Qué estamos haciendo? Estamos literalmente destruyendo nuestro milagro de un hogar. Lo siento mucho, Tierra.
Por su parte, la modelo Cara Delevingne compartió con dos fotografías la información de que la Amazonia es uno de los más importantes ecosistemas en la Tierra, por lo que pidió difundir la alerta porque la selva amazónica, conocida como “el pulmón del mundo”, ha sido afectado por 75 mil incendios el presente año, la cifra más alta desde que se comenzaron a llevar registros en 2013.