¡Ahora nos lo explicamos todo! Después de su divorcio con el cantante Chris Martin, Gwyneth Paltrow encontró la llave de la felicidad dentro del matrimonio: no vivir bajo el mismo techo que su marido, Brad Falchuk.
Casada en segundas nupcias con el productor, la actriz estadounidense tiene un secreto para mantener su matrimonio sólido: vive en una casa muy cercana a la de su esposo y solamente se ven unos cuatro días por semana.
En entrevista con The Sunday Times, Gwyneth reveló las reglas de convivencia a las que se encuentra sujeta su unión, consistentes en convivir y dormir juntos en la casa de ella cuando Falchuk no debe hacerse responsable de sus hijos Brody e Isabella, producto de su matrimonio anterior con Suzanne Bukinik.
La rubia favorita de varias generaciones dijo que esta forma de relacionarse tiene que ver con el concepto de “polaridad”, aprendido de su entrenador de vida. “Esto nos permite mantener la rutina cotidiana de nuestros hijos” -ella tiene dos: Apple de 15 años y Moses de 13- “y darle un poco de sabor a la vida de pareja”, afirma.
Gwyneth Paltrow y Brad Falchuk se casaron en una ceremonia íntima en East Hampton, Nueva York, el año pasado.