Duckie Thot es una modelo australiana de origen sudanés que ha enamorado al mundo de la moda y a las redes sociales gracias a su inigualable belleza. Alcanzó la fama en el programa televisivo Australia’s Next Top Model 2013 cuando tenía 17 años. Ahora, un lustro después, es la nueva embajadora de L’Oréal París.
Su nombre verdadero es Nyadak, pero como a sus compañeros de escuela se les dificultaba pronunciarlo decidió cambiarlo por Duckie, aunque mantuvo su apellido, pues Thot es una palabra proveniente de la tribu de los nuer, de Sudán del Sur, y quiso mantener un recordatorio de sus raíces, de una familia que tuvo que huir de África para salvarse de la guerra civil.
Nadie quería contratarla
Al término del programa de televisión buscó trabajo como modelo en Australia, pero como no había demanda de modelos de piel oscura no tuvo éxito. Entonces quiso probar suerte en Nueva York, por lo que envió su portafolios a varias agencias de la Gran Manzana, sin embargo, todas la rechazaron.
No fue sino hasta que decidió dejarlo todo y comprar un boleto de avión a Estados Unidos con sus ahorros para presentarse personalmente en dichas agencias que al fin decidieron darle la oportunidad.
Fue discriminada por sus rasgos físicos
Su paso por Australia’s Next Top Model la hizo sentir discriminada pues tenía que peinarse sola, ya que los estilistas no sabían hacer las trenzas típicas que suelen llevar las mujeres de raíces africanas; además, actualmente aún debe llevar su propio maquillaje porque los expertos no saben cómo maquillar su tono de piel.
Sumado a eso, sufrió acoso cibernético por parte de personas que criticaban su tono de piel y su aumento de peso. Pero más que intimidarla, esos comentarios la ayudaron a alzar la voz para que la industria de la belleza tomara en cuenta el físico de las mujeres afrodescendientes.
Quiere aprovechar su fama para ayudar a jóvenes a amar su piel
Las críticas y las batallas por encontrar su lugar en el mundo de la moda y la belleza la hicieron hallar el coraje para ayudar a que las mujeres de color tengan las mismas oportunidades y derechos que otras:
Tengo ganas de ayudar a que más chicas jóvenes amen la belleza de su piel oscura. En mi mente estaré viajando en el tiempo y diciéndome a mí misma: ‘sueña en grande, trabaja duro y confía en ti, porque un día vas a estar diciéndole sí a la marca número uno de belleza’.