El padre de Britney Spears, James Spears, fue suspendido como parte de la curatela después de una larga, polémica y complicada batalla legal que ha persistido desde que la estrella pop fue puesta bajo tutoría legal hace 13 años, en 2008.
La jueza Brenda Penny decidió que James no será parte de la curatela, removiéndolo inmediatamente como tutor legal de la cantante. John Zabel, un contador privado, lo reemplazará en el cargo de tutor principal, supervisando las decisiones financieras de la cantante hasta nuevo aviso.
Mientras tanto, Jodi Montgomery, quien ha supervisado la vida personal de Britney durante los últimos meses, seguirá siendo la encargada de revisar que la cantante mantenga su salud física y mental de la mejor manera, aunque aún no se sabe si durante el juicio, la jueza decida sustituirla o no.
Aún no se decide si la curatela como tal seguirá vigente o no, pero el abogado de Britney, Mathew Rosengart, declaró que si todo marcha de acuerdo a su plan de ataque y las pruebas que presentará ante la corte, la curatela debería ser suspendida permanentemente a finales de este otoño.
Rosengart declaró ante la jueza que Britney está de acuerdo con la estrategia legal de suspender a su padre para después buscar que el acuerdo de curatela termine por completo, ya que es lo que ha querido desde hace más de 10 años.
La suspensión de James es el resultado más significativo en el desarrollo del caso desde que Britney declaró de manera virtual ante la corte el maltrato y abuso tanto psicológico como físico al que ha sido sometida durante los últimos años de su vida, razón por la que no ha querido continuar con su carrera profesional.