Muchos podrían pensar que la historia de Justin Bieber y Hailey Baldwin sucedió muy rápido: en el 2016 tuvieron un breve romance, terminaron; Justin volvió con Selena Gomez y Hailey corrió a los brazos de Shawn Mendes, pero en el 2018 se volvieron a encontrar; tres meses después se comprometieron y dos más tarde se casaron por el civil. Ahora se volvieron a dar el “sí” en una ceremonia religiosa.
Durante este año los paparazzi los han fotografiado discutiendo, llorando, con rostros serios, pero también muy enamorados entre serenatas sorpresa. La celebración que se llevó a cabo el pasado 30 de septiembre en Carolina del Sur es la muestra de que la adversidad no puede derrotar al amor verdadero.
Justin y Hailey se conocieron en el 2009
Tenían 14 y 12 años, respectivamente. El padre de la modelo los presentó tras bambalinas en el programa de televisión The Today Show. Fue el inicio de su historia, tal como lo dijo el cantante en su cuenta de Instagram.
La boda duró 3 días
Los recién casados rentaron el Palmetto Bluff del Hotel Montage, por tres días para ellos y sus invitados. El domingo fue la cena de ensayo, el lunes la boda y el martes la tornaboda.
La discreción y los lujos pueden ir de la mano
Para los estándares de las celebridades, se podría decir que fue una celebración “pequeña” y “discreta” ya que solo invitaron a 156 personas, 36 de las cuales eran sus familiares más cercanos. Según algunos asistentes, en vez de celebraciones elegantes, se dedicaron a vivir el momento.
Como un sueño hecho realidad
La noche anterior a las nupcias, los esposos y sus allegados disfrutaron viendo The Notebook al aire libre, la película perfecta para jurarse amor eterno.
Invitados VIP
Los grandes afortunados para asistir al casamiento fueron Pattie Mallette y Jeremy Bieber (padres del cantante), Stephen y Alec Baldwin (papá y tío de la modelo), Kendall y Kylie Jenner, Travis Scott, Ed Sheeran, Usher, Jaden Smith, Camila Morrone (novia de Leonardo DiCaprio), Joan Smalls, Justine Skye, entre otros.
Mientras que las amigas cercanas de Hailey, Gigi y Bella Hadid, brillaron por su ausencia.
Los padrinos
El padrino de Justin fue su representante, Scooter Braun, y las madrinas de Hailey fueron su hermana Alaia y su prima Ireland Baldwin.
Un cuarto de millón de dólares
Justin vistió una camisa blanca con pantalón negro, como se esperaría de cualquier esposo en el altar, mientras que su mujer (que ahora se encuentra en sus redes sociales como Hailey Rhode Bieber) usó varios vestidos para cada día, entre los que se encuentra uno hecho a la medida por la diseñadora Vivienne Westwood, zapatillas de princesa y un lazo de organza, creados por Jimmy Choo.
Según algunos medios de comunicación, la boda costó alrededor de un cuarto de millón de dólares.
… Y vivieron felices para siempre
A pesar de que llevan un año siendo marido y mujer, para ellos era importante celebrar una ceremonia religiosa acorde con la nueva vida que Justin Bieber profesa en las redes sociales.
¡Lo sentimos, believers!
https://twitter.com/typicalbizzzle/status/1178662469285351424
Me siento devastada y traicionada por Justin Bieber, lo he esperado por nueve años y tuvo las agallas de no casarse conmigo ni invitarme a su boda.