Recientemente, el actor Tom Felton celebró el lanzamiento de su libro Beyond the Wand, en el que no solo comparte sus experiencias y trayectoria como actor, sino que habla de sus años en Harry Potter, interpretando a Draco Malfoy, y de todo lo que ocurrió en su vida personal después de su paso por la exitosa saga que, por cierto, fueron situaciones muy duras.
Una de ellas fue su caída en el alcohol al llegar a Los Ángeles, California, lugar en donde el británico se vio abrumado por el estilo de vida de toda una estrella de Hollywood, por lo que en la bebida encontró una especie de “escape”.
De no estar particularmente interesado en beber pasé a tomar algunas pintas de cerveza diarias antes de que el sol se hubiera puesto, siempre acompañadas de un trago de whisky.
Por su conducta adictiva, su entonces novia, Jade Olivia, su representante y equipo de trabajo realizaron una intervención, pidiéndole a Tom que ingresara a un centro de rehabilitación en Malibú o lo dejarían como cliente.
Fue debido a esta condicionante que Tom aceptó e ingresó a un centro de rehabilitación de 40 mil dólares al mes. Fue allí en donde el actor se dio cuenta de que hace muchos años no estaba sobrio. Además, tuvo una desbordante sensación de claridad e ira por la situación que había vivido.
Sin embargo, su permanencia no fue duradera, pues a las 24 horas decidió abandonar las instalaciones y al salir se dirigió a un bar. Como era de esperar, esto provocó una fuerte discusión con Jade, que detonó en una ruptura. Aunque en ese momento, el actor no consideró que su consumo de sustancias justificara la intervención, fue debido a esta que tuvo un poco más de claridad.
Después de esto, finalmente, Tom ingresó a un centro más pequeño, pero las cosas tampoco marcharon bien en ese lugar, pues el actor fue expulsado del programa a las tres semanas de haber ingresado luego de ser sorprendido con una mujer en su habitación. Sin embargo, Felton asegura que ese tiempo fue suficiente para que la experiencia fuera un cambio de vida.
Para el intérprete de Draco Malfoy, el haber sido expulsado no fue un pretexto para detenerse en su recuperación, así que continuó haciendo un voluntariado y adoptó un perro. Además, para su nuevo comienzo, Tom se mudó a la ciudad de Venice Beach y afirma que durante años, su “vida fue mejor que nunca”.
Sin embargo, a pesar de que la estrella de El planeta de los simios hizo de todo un poco para enderezar su camino, tiempo más tarde, volvió a necesitar ayuda profesional, aunque ahora por distintas razones, ya que la ansiedad y depresión, de las que ha hecho referencia, fueron el motivo para recibir ayuda.
Debido a todas estas duras situaciones por las que Tom Felton ha pasado, es que hoy por hoy, el británico de 35 años no tiene miedo de alzar las manos y decir abiertamente que está mal y que necesita ayuda, pues menciona que atender la salud mental debe normalizarse, tal como cuando vas al médico para atender la salud física.
Ya no tengo vergüenza de alzar las manos y decir: No estoy bien.