Recientemente, el multipremiado cineasta mexicano Guillermo del Toro dijo que “La animación ha llegado a otro nivel” y así lo hemos podido comprobar con su aclamada cinta Pinocho, que le ha hecho ganar distintos premios en todo el mundo.
Debido a eso, no es de extrañarse que en el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA) le dedicaran una exposición- tributo por su película Pinocho, que luego de casi de dos meses de estar disponible, este 15 de abril será su último día en el recinto.
De acuerdo con los medios, dicha exposición ha sido un éxito y ha lucido abarrotada por miles de visitantes al recinto, quienes, generalmente, buscan tomarse una fotografía junto a la Noche estrellada de Vincent van Gogh u otras obras de pintores de renombre como Pablo Picasso, Salvador Dalí o René Magritte.
Sin embargo, con la exhibición Crafting Pinocchio, los asistentes van en busca de la marioneta gigante de Pinocho que cuelga del techo con Pepe Grillo en el pecho.
Cabe señalar que dicha exhibición fue orquestada por Ron Magliozzi, un curador de cine del MoMA y está desplegada en tres salas, que hacen a Guillermo del Toro el protagonista de todo el recinto. En esas tres áreas se muestra el proceso artístico y artesanal de la primera película en stop-motion del cineasta mexicano.
En ella podemos ver ocho sets de filmación a escala real, realizados en Portland por diseñadores mexicanos, ingleses y estadounidenses. Desde luego, están las marionetas estelares de la cinta, planos, partituras, los moldes de los títeres y las mil caras de Pinocho con sus diferentes expresiones y estados de ánimo.
Además de estos y otros detalles de utilería que amueblan los escenarios, el visitante puede vivir la experiencia no solo de estar en el set, sino de pasear por la casa-taller de Geppetto, en donde él aparece al pie de la escalera y el muñeco yace inerte en la mesa de trabajo junto a la ventana.
Finalmente, para que los asistentes puedan apreciar cómo está articulado el muñeco de madera, en la exposición se encuentra una disección del cuerpo de Pinocho, así como una reproducción de videos de alta velocidad que documentan el proceso tan complejo que se usa en el stop-motion.
No cabe duda de que con este tributo a Guillermo del Toro, se confirman sus palabras de que la animación ha llegado a otro nivel, de su mano.