A más de ocho meses de que el guionista y director de cine estadounidense Todd Phillips confirmó la secuela de la exitosa película Joker y tras informar que esta cinta será un musical con Lady Gaga interpretando a la nueva Harley Quinn, mucho se ha dicho sobre que esta cinta será completamente distinta a lo que hemos visto en otras adaptaciones, por lo que los fanáticos no han dejado de estar al pendiente de cada detalle.
Como regalo de San Valentín, tanto Phillips como Gaga quisieron dar una probadita de cómo lucen la cantante de 36 años y el actor estadounidense de 48 en sus roles en esta secuela, por lo que compartieron la primera imagen de la tan esperada peli de DC y Warner.
Bajo los textos “Feliz Día de San Valentín” y “Folie à Deux“, el director y la intérprete de Poker Face compartieron, respectivamente, una imagen en la que se puede ver la cara de la también compositora y bailarina estadounidense viendo de frente a Phoenix caracterizado del Guasón, dando a entender que entre ambos ya existe un sentimiento.
Joker: Folie à Deux se encuentra en pleno rodaje y se prevé que tenga su estreno en cines el próximo 4 de octubre de 2024. La secuela ha generado un alta expectativa al estar protagonizada por dos actores ganadores del Óscar, así como cierta curiosidad por ver el giro que se le dará a la trama al tratarse de un musical.
Recientemente, James Gunn, co-CEO de DC Studios, anunció que la secuela del Joker no formará parte del Universo extendido de DC (DCEU, por sus siglas en inglés), sino que será parte de una categoría conocida como DC Elseworlds, sección donde registran las historias que están ubicadas en tiempos y lugares diferentes a la continuidad original de los cómics.
Además del primer vistazo de Lady Gaga y Joaquin Phoenix en sus personajes del Joker 2, recientemente, algunos trabajadores revelaron los malos tratos y las pésimas condiciones que han recibido durante la grabación de esta cinta, acusaciones en las que afirman que la producción ni siquiera les permite ir al baño o beber agua.
La queja surgió por parte de actores extras enojados que manifestaron su disgusto en el set de grabación, pues aseguran que trabajan por más de dos horas sin parar y, durante ese tiempo, la producción no les da permiso de ir al baño o beber agua, situación que ha generado tensión en la filmación.
Temerosos por las repercusiones, los trabajadores prefieren no decir nada al respecto, ya que los extras que se han quejado han sido reprendidos y, en caso de ser una emergencia, tienen que explicar la razón por la que deben ir al baño. Ante las quejas a la violación de tiempos de descanso, el Sindicato de Actores de Cine-Federación Estadounidense de Artistas de Radio y Televisión investigó y habló con la producción al respecto, asegurando que seguirán de cerca el caso y estarán monitoreando el set.