La actriz y política Cynthia Nixon protagoniza Sé una dama, dijeron, el video feminista de la revista Girls. Girls. Girls. que retrata las contradictorias exigencias a las que mujeres de todo el mundo nos enfrentamos para encajar en estándares impuestos por terceros.
El texto pertenece a la bloguera Camille Rainville y habla de la interminable lucha por cumplir con lo “socialmente aceptable”, pues sin importar lo que hagamos siempre habrá algo nuevo que modificar según otros. Nunca es suficiente.
No estamos para cumplir expectativas
Ser mujer es como ser un ave enjaulada, dijo la filósofa Marilyn Frye en su obra Teoría de la opresión, ya que cualquier decisión que tomemos será frenada por los barrotes del machismo.
Pareciera que nacer mujer es nacer bajo la mirada inquisitiva de quien busca hasta el menor “defecto” y no nos perdona ser humanas ni ser libres. Es preferible dejarnos moldear y adaptarnos sin queja a lo que se espera que seamos: flacas pero curvilíneas, seductoras pero recatadas, todo pero nada.
El mensaje del video es tajante y claro. Por mucho tiempo hemos sido presas de las expectativas de los hombres, de los medios, de Hollywood, y pareciera que todos —menos nosotras— tienen derecho de elegir nuestra apariencia y forma de ser. Pero, respaldadas por la voz de Nixon, decimos: ¡Eso se acaba ya!
Sé una dama, dijeron
Sé una dama, dijeron. Tu falda está muy corta. Tu blusa es muy pequeña. No muestres tanta piel. Cúbrete. Deja algo a la imaginación. No lo tientes. Los hombres no pueden controlarse. Los hombres tienen necesidades. Sé sexi. Sé seductora. No seas tan provocativa. Lo estás pidiendo. Viste de negro. Usa tacones. Estás muy cubierta. Estás muy descubierta. ¡Te ves descuidada!
Sé una dama, dijeron. No seas muy gorda. No seas muy flaca. Come. Adelgaza. Deja de comer tanto. Pide una ensalada. No comas carbohidratos. No pidas postre. Ponte a dieta. ¡Por Dios, pareces un esqueleto! ¿Por qué no comes? Te ves demacrada. Pareces enferma. A los hombres les gustan las mujeres con algo de carne. Sé talla cero. Sé talla doble cero. Sé nada. Sé menos que nada.
Sé una dama, dijeron. Quítate el vello corporal. Blanquea esto. Blanquea aquello. Elimina tus cicatrices. Cubre tus estrías. Rellena tus labios. Inyecta bótox en tus arrugas. Levanta tu cara. Mete la barriga. Realza tus pechos. ¡Sé natural! Lo intentas demasiado. Te ves forzada. A los hombres no les gustan las mujeres muy forzadas.
Sé una dama, dijeron. Usa maquillaje. Ilumina tus pómulos. Delinea tus párpados. Rellena tus cejas. Alarga tus pestañas. Colorea tus labios. Polvo, rubor, bronceador, iluminador. Tu cabello está muy corto. Tiñe tu cabello. ¡No de azul! Eso se ve antinatural. Sé joven. Lo viejo es feo. A los hombres no les gusta lo feo.
Sé una dama, dijeron. Sé recatada. Sé pura. No seas una cualquiera. No te quedes a dormir por ahí. A los hombres no les gustan las zorras. No seas una mojigata. No seas tan rígida. Sonríe más. Complace a los hombres. Sé experimentada. Sé sexual. Sé inocente. Sé sucia. Sé genial. No seas como las demás.
Sé una dama, dijeron. No hables muy alto. No hables mucho. No seas intimidante. ¿Por qué eres tan desalmada? No seas una perra. No seas tan mandona. No seas tan sentimental. No llores. No grites. No maldigas. Soporta el dolor. No te quejes. Dobla su ropa. Cocina su cena. Mantenlo feliz. Ese es el trabajo de una mujer. Serás una buena esposa algún día. Toma su apellido. ¿Conservaste su apellido? ¡Loca feminista! Dale hijos. ¿No quieres hijos? Algún día los querrás. Cambiarás de opinión.
Sé una dama, dijeron. No seas violada. Protégete. No bebas mucho. No camines sola. No salgas muy tarde. No te vistas así. No enseñes mucho. No te emborraches. No sonrías a extraños. No salgas de noche. No confíes en nadie. No digas que sí. No digas que no. Simplemente sé una dama, dijeron.
La voz de todas
https://youtu.be/y8qyozbPkHk