Nuestro majestuoso universo siempre encuentra la manera de sorprendernos, pues a pesar de todo lo que el hombre ha llegado a descubrir, en esa inmensidad siempre habrá una nueva sorpresa aguardándonos; el cosmos es tan desconocido para nosotros que en ocasiones nos llega a causar cierto temor.
Al ver estas imágenes tomadas por el telescopio Hubble, no podemos evitar preguntarnos si hay alguien en el universo que tenga la gigantesca llave para abrir este mágico espacio, ya que, literal, se formó un ojo de cerradura cósmico de dimensiones gigantescas.
Este sorprendente retrato del telescopio espacial Hubble de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés) y la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés) muestra una nebulosa de reflexión en la constelación de Orión, llamada NGC 1999, que se encuentra a unos 1350 años luz de nuestro planeta, cerca, precisamente, de la Nebulosa de Orión, el lugar de formación de estrellas masivas más próximo a la Tierra.
Según los expertos de la NASA y ESA, estas sorprendentes nebulosas solo pueden brillar si existe una fuente de luz incrustada en ellas. En este caso, la pequeña estrella recién nacida llamada V380 Orionis, que se aprecia al centro de la imagen, es la que funciona como una eficiente lámpara para iluminar a la nebulosa.
Sin embargo, el aspecto más notable de la apariencia de NGC 1999 es el llamativo agujero en su centro, que se asemeja a un ojo de cerradura negro como la tinta de proporciones cósmicas.
Esta imagen se creó partiendo de las observaciones de archivo de la Cámara Planetaria de Campo Amplio 2, que se realizaron alrededor del año 1999. En aquel momento, los astrónomos pensaban que la mancha oscura en la nebulosa NGC 1999 era algo que llaman glóbulo de Bok, que es una nube de gas densa y fría, moléculas y polvo cósmico que ocultan la luz de fondo.
Pero ahora que le han dado seguimiento, observándola a través de una colección de telescopios, incluido el Observatorio Espacial Herschel de la ESA, revelaron que esa mancha oscura en realidad es una región vacía del espacio. Sin embargo, el origen de esta grieta con forma de ojo de cerradura dentro de la nebulosa NGC 1999 continúa siendo un misterio.
1/ You would need a big key to unlock this peculiar picture of the week from Hubble. This image shows NGC 1999, a reflection nebula in the constellation Orion. NGC 1999 is composed of detritus left over from the formation of a newborn star.
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— HUBBLE (@HUBBLE_space) October 24, 2022
Necesitarías una llave grande para desbloquear esta peculiar imagen de la semana del Hubble. Esta imagen muestra NGC 1999, una nebulosa de reflexión en la constelación de Orión. NGC 1999 se compone de detritos que quedaron de la formación de una estrella recién nacida.