Recientemente, a través de un estudio publicado en la revista Nature, se dio a conocer la investigación de unos científicos estadounidenses, quienes aseguran que la proteína del líquido de una molécula en el cerebro ayuda a rejuvenecerlo y recuperar la memoria, por lo que podría ser el principio de la cura contra el alzhéimer.
La investigación fue realizada por la Universidad de Stanford, en California, Estados Unidos, donde hicieron las pruebas pertinentes en ratones, lo que dio como resultado que la proteína del líquido joven llamada Fgf17 es capaz de rejuvenecer cerebros viejos, así como evitar la pérdida de la memoria e incluso recuperarla.
Según el estudio publicado, los científicos descubrieron que la proteína Fgf17 es capaz de estimular la producción de oligodendrocitos jóvenes, que forman parte de la sustancia blanca del cerebro, la cual es sustento de la sustancia gris, donde se encuentran las neuronas.
Descubrimos que la infusión del factor de crecimiento de fibroblastos 17 (Fgf17) es suficiente para inducir la proliferación de OPC (células progenitoras de oligodendrocitos) y la consolidación de la memoria a largo plazo en ratones de edad avanzada, mientras que el bloqueo de Fgf17 afecta la cognición en ratones jóvenes.
– Explica el estudio
Este descubrimiento podría ser un gran avance en la lucha contra el alzhéimer, ya que no solo podría evitarse, sino que también podría ser un buen tratamiento para que los pacientes puedan recuperar la memoria.
Las pruebas consistieron en extraer el líquido cefalorraquídeo tanto a ratones de dos meses y medio como a ratones de año y medio para comparar los resultados. Estos arrojaron que 38 proteínas de ese líquido cambian significativamente con el envejecimiento, mientras que otras seis se relacionan con la cognición o los marcadores del alzhéimer en humanos.
Los resultados ofrecen una estrategia terapéutica para prevenir o revertir el declive cognitivo asociado a la edad y a las enfermedades neurodegenerativas. Descubrimos que la infusión de LCR (líquido cefalorraquídeo) joven directamente en cerebros envejecidos mejora la función de la memoria.
– Steven Shuken, investigador que participó en el estudio
Según lo visto en los ratones estudiados, los viejos olvidaron una secuencia sencilla, que consistía en una luz que se enciende para después recibir una descarga eléctrica, mientras que los jóvenes se ponían alertas luego de que veían la luz, ya que recordaban que seguido de eso venía la descarga.
Este estudio no solo implica que el Fgf17 tiene potencial como diana terapéutica, sino que también sugiere que las vías de administración de fármacos que permiten que las terapias accedan directamente al líquido cefalorraquídeo podrían ser beneficiosas en el tratamiento de la demencia.
– Miriam Zawadzki y María Lehtinen, investigadoras del estudio
La investigación abre paso a una nueva oportunidad en el campo de la salud cerebral. Aunque aún no se comienza a trabajar en un fármaco para frenar el deterioro cognitivo del cerebro, podría ser el primer paso para encontrar un posible tratamiento para enfermedades neurodegenerativas como la demencia y el alzhéimer.
