Una serie que, sin duda, los amantes de la literatura clásica están esperando con gran expectación es la llamada Macondo, ya que estará basada en la obra que encumbró a Gabriel García Márquez como uno de los grandes escritores del pasado siglo, Cien años de soledad.
A través de la plataforma de streaming Netflix podremos disfrutar esta maravillosa adaptación, que esperamos que sea contada como al gran escritor le hubiera gustado. Sin duda, así será, pues los hijos de García Márquez, Rodrigo García y Gonzalo García Barcha, serán productores ejecutivos del proyecto, que se filmará principalmente en Colombia.
Durante décadas, nuestro padre se mostró reacio a ceder los derechos cinematográficos de ‘Cien años de soledad’ porque creía imposible realizarla bajo las limitaciones de tiempo de una película y pensaba que producirla en un idioma que no fuera el español no le haría justicia.
Pero, en la actual época dorada de las series, con el nivel de talentosos escritores y directores, la calidad cinematográfica y la gran recepción mundial del contenido en idiomas extranjeros, el momento no podría ser mejor para llevar una adaptación a las audiencias globales de Netflix.
Por su parte, Francisco Ramos, vicepresidente de Originales Internacionales en Español de Netflix, mencionó a través de un comunicado lo agradecidos que se sienten de que su plataforma haya sido la elegida para desarrollar el ambicioso proyecto.
Nos sentimos increíblemente honrados de que se nos haya confiado la primera adaptación filmada de ‘Cien años de soledad’, una historia atemporal e icónica de Latinoamérica que estamos encantados de compartir con el mundo.
Una historia mágica que cuenta las peripecias de la familia Buendía, quienes fueron los fundadores de una increíble ciudad que el autor narra con su magnífico estilo. Precisamente fue el nombre de este lugar el que se tomó como título para la serie.
Macondo era entonces una aldea de veinte casas de barro y cañabrava construidas a la orilla de un río de aguas diáfanas que se precipitaban por un lecho de piedras pulidas, blancas y enormes como huevos prehistóricos. El mundo era tan reciente que muchas cosas carecían de nombre y para mencionarlas había que señalarlas con el dedo.
La soledad le había seleccionado los recuerdos y había incinerado los entorpecedores montones de basura nostálgica que la vida había acumulado en su corazón y había purificado, magnificado y eternizado los otros, los más amargos.
Con esta historia, publicada por primera vez en 1967, el escritor fue distinguido con el Premio Nobel de Literatura en el año de 1982. Justo este año se cumplen 40 años de aquel acontecimiento y qué mejor manera de celebrarlo que poner la obra del autor al alcance de millones espectadores.