Seguramente recordarás la peculiar historia de la jefa de grupo que estafó a sus compañeros por 30 mil pesos, poco más de 1500 dólares, esa en la que una chica se esperó hasta el último momento para revelar que no había pagado el salón de la fiesta de graduación y todos terminaron festejando en un taller mecánico al no tener otro lugar para ir.
Algo parecido acaba de suceder en el municipio de Francisco I. Madero, Coahuila, México, en donde un pastor de iglesia, supuestamente, engañó a toda una comunidad al invitarlos a una posada en la que prometió toda clase de regalos. A más de dos mil personas se les aseguró que con su aportación de 10 pesos, es decir, 50 centavos de dólar, podrían obtener cobijas, ropa, juguetes, comida y aguinaldo, pero al llegar al evento, no fue así.
De acuerdo con los testimonios, la posada se llevó a cabo en la Iglesia Nueva Jerusalén, lugar al que llegaron cientos de familias con la esperanza de pasar un buen rato y llevarse un presente. Pero, rápidamente, todo se salió de control, ya que la capacidad del lugar se vio rebasada, razón por la que muchos solo obtuvieron la bendición de Dios.
Hubo mucha gente y hasta se peleaban porque se les pedía que hicieran fila, pero había muchas que ya habían entrado y venía a dejar la ropa, la encargaban y se volvían a formar. Muchos se enojaron.
Muchos asumieron que el pastor Abner Terán se quedó con la aportación, pues, aunque suena poco dinero, según la publicación de Facebook donde se hizo la invitación, fueron al menos cinco mil boletos los que se vendieron. Ante las quejas, el alcalde Jonathan Ávalos dijo que tomaría cartas en el asunto. Sin embargo, los ministros de la iglesia se deslindaron de toda responsabilidad.
Las acusaciones no le agradaron en lo absoluto al padre Abner, quien salió a defenderse a través de un comunicado en Facebook. En este mencionó que todo se trató de una mala logística y que durante enero pretende llevar un juguete a cada persona que se haya registrado, así como su dinero. Además, aprovechó para decirle al alcalde sus verdades después de que este lo amenazara con una demanda.
El alcalde me ha dicho que me va a demandar. Okey, está perfecto, yo voy a regresar todo. ¿Sabes por qué? Porque los eventos que hago los hago con el sudor de mi frente, no los hago agarrando dinero sucio ni falso como tú.